lunes, abril 27, 2015

VIII Travesía del Jurásico, Especial Caminito del Rey

Itinerario: Sendero del Gaitanejo-Caminito del Rey-barriada del Chorro-presa de la Encantada-ermita de Villaverde- Castillón de la Ermita-tajos del Almorchón-pico del Convento (sierra de la Pizarra) – descenso por Los Camoriles-Parque Ardales
Entorno: Paraje natural Desfiladero de los Gaitanes-El Chorro
Hora y punto de encuentro: 7.50 am aparcamiento aledaño al restaurante El Kiosco, justo frente a la mágica casa del Administrador. En el Parque Ardales, lugar muy conocido por todos los senderistas de Málaga y provincias aledañas.
Distancia total aproximada: 22 Km con la variante, optativa, del ramal de ida y vuelta al Pico del Convento
Desnivel acumulado aproximado: 600 m (ascenso)
Dificultad por esfuerzo físico: Media
Dificultad por orientación: Media-alta en alguna zona de la sierra de La Pizarra, especialmente a la hora de escoger el mejor lugar para descender por el tramo de descenso por los taffonis de Los Camoriles
Dificultad técnica (trepadas, canchales, etc…): la zona por donde discurre la mayor parte de la ruta es muy dócil, salvo algún tramo de destrepe, con toboganes de fuerte pendiente y algunos escalones altos por la zona de descenso de Los Camoriles.
Zonas o pasos de riesgo: Las pasarelas del caminito del Rey, se encuentran en perfecto estado. Sólo el nuevo puente metálico tiembla un poco si hay viento, pero las barandillas son muy seguras. Nada que ver con el antiguo estado ruinoso del Caminito que todos conocimos en su día.
Fecha de realización y meteorología: sábado 25 de abril 2015, cielos cubiertos, con una temperatura que apenas superó los 20ºC al mediodía con una suave brisa del sur que hizo muy llevara la ascensión a la sierra de La Pizarra.

Bibliografía: El Chorro, guía del Excursionista, Juan Ignacio Amador
1ª parte sendero del Gaitanejo (ruta 6 del libro)
Una vez reunidos frente al restaurante El Kiosco, breve charla de bienvenida y hacia el túnelillo rectilíneo de 150 m de longitud que atravesamos para encaminarnos de la forma mas directa hacia la presa del Gaitanejo, pasando frente a hitos geológicos tan emblemáticos como el Arco Gótico, también conocido como La Roseta, en la orilla de enfrente. O los espectaculares taffónis que nos encontramos al túnel de la pista terriza, que en pocos minutos nos lleva hasta las inmediaciones de la histórica central hidroeléctrica del Gaitanejo, donde la Señorita María Ponce de Diputación y el monitor que habían enviado expresamente para laa ocasión (una hora antes de su horario habitual), llevaran a cabo el protocolo de control de asistentes y entrega de cascos.
2ª parte, El Caminito del Rey Una vez dada la charla de rigor, resúmen del recorrido y normas de circulación por la pasarela nos pusimos en marcha, quedando a laa elección de cada cual, el ritmo de marcha, las fotos qque cada uno quisiera realizar, opción ida y vuelta, sólo ida o travesía completa, fijando una hora concreta para reagruparnos todos los que fueran a hacer la travesía completa en la barriada del Chorro.
 A las 9.00 am iniciamos puntualmente el recorrido, pasando junto al pequeño salto de agua que maarca la entrada en el desfiladero del Gaitanejo.
 Nada mas adentrarnos en él, resulta mas que evidente comprobar el enorme poder erosivo del agua a través de milenios, incluyendo fuertes crecidas esporádicas y sin ningún tipo de control, cuando no existían las presas que hoy se encuentran aguas arriba.
El hecho de que las paredes que llevamos a la derecha, por donde discurre la pasarela, estén compuestas por calizas nodulosas y las de la izquierda por calizas oolíticas, favoreció el hecho de que las aguas pudieran abrirse paso por este desfiladero, tendiendo a hacerlo cada vez mas profundo a lo largo del tiempo.
 En el lugar donde el desfiladero se abre un poco mas, comenzamos a caminar junto a tramos del canal que discurren a cielo abierto y que pronto se intercalan con tramos subterráneos.
El paisaje es grandioso en todo momento y resulta difícil caminar deprisa, cuando lo que tenemos ante nosotros es un auténtico monumento natural.
Al llegar aal puente de la Cueva del Toro qque en su día se construyó para comunicar a la vía del trén con el caminito del Rey y la cantera del Polvorín, mi buen amigo Antonio Francisco Gallego, "La Locomotora de Alhaurín" me sorprendió sacándose de su mochila el libro del Chorro, guía del excursionista, para qque se lo firmara. ¡Menudo escenario y menudo momento mas emotivo!, que nuestra querida amiga Rosa "La Niña Bonita", inmortalizó de esta guisa. Mas adelante, en el valle del Hoyo, el amigo Felix Rodríguez Aguilar haría lo propio.
 Conforme vamos dejando atrás el desfiladero del Gaitanejo, la disposición de los estratos calizos perpendiculares, tiende hacia la horizontalidad. Los tajos del Almorchón y el peñón del Cristo, destacan por encima del denso pinar que tiñe de verdor el denominado Valle del Hoyo o de Los Naranjos.
 El Canal lo llevamos en todo momento a nuestra derecha y a lo largo de este dócil sendero, pasaremos junto a dos puentecillos que lo atraviesan. Del segundo puente (en la imagen), parte el sendero que llega directamente hasta el collado que se encuentra al oeste de la cumbre del Peñón del Cristo o Castillón de la Ermita (al fondo), por donde pasaríamos después del almuerzo.
No tardaríamos en llegar al inicio de la pasarela correspondiente al tramo del Desfiladero de Los Gaitanes. Según el Maestro Pedro Cantalejo, hasta aproximadamente 1920 existía una colonia de "quebrantahuesos" en esta zona, por aquella época se les conocía localmente como "gaitanes", y de ahí ha llegado hasta nuestros días el nombre del paraje.
Resulta imponente esa especie de hornacina gigante que podemos contemplar en la parte de arriba del tajo de Las Tres Cruces, al acercarnos aa laa entrada del Desfiladero de Los Gaitanes o del Gran Gaitán
Si de por sí este desfiladero ya es un impresionante monumento natural con estratificación de calizas dispuestas verticalmente a una escala grandiosa. También resulta admirable la magnífica obra de ingeniería del puente-viaducto de la vía del tren que nos encontramos a los pies del tajo de Las Tres Cruces contruido allá por la década de los 50 del siglo XIX, con los medios tan rudimentarios de aquella época. Por no hablar del trazado original del Caminito del Rey durante sus primeros 20 años conocido como "Los Balconcillos", sostenido a base de railes sobrantes de la cercana vía del tren.
 Si la entrada en el desfiladero de Los Gaitanes ya es de una belleza casi imnótica, al qquedarnos maravillados con su grandiosidad, no lo es meenos, cuando aal entrar, echamos la vista atrás haciaa el Valle del Hoyo, con su frondosidad y las paredes del primer desfiladero.

En la imágen nuestros amigos: Rosa Romero y su hijo Rusik. Precisamente no sería hasta poco antes de llegar al puente acueducto de Eugenio Ribera, cuando ya empezamos a encontrarnos con los integrantes del primer grupo que venían en dirección contraria. Y es que sin lugar a dudas, el hecho de haber disfrutado del Caminito del Rey, para nosotros solos durante casi dos horas, fue un regalo impagable por el que siempre le estaremos agradecidos a las personas que nos permitieron disfrutar de tan inolvidable jornada.
 Dentro de la grandiosidad que nos rodea, también hay pequeñas maravillas como el minúsculo pero importantísimo puente de la falla que se ve al fondo. O el fósil de amonite que señalamos en la imagen y otros existentes en la pared de enfrente, identificados por la mirada experta y el conocimiento previo de nuestra encantadora anfitriona: María Ponce.
 Otro de los puntos mas llamativos de este desfiladero es el mágico rinón donde una gifgantesca falla ha obligado a trazar una cerradísima "V" que condicionó el trazado del Caminito del Rey, tanto el original, como el nuevo, que en todo momento discurre por encima de éste.
Mas adelante nos encontramos con unas emotivas placas dedicadas a los tres chavales que fallecieron en agosto de 2000: Antonio "Pocholo", Andrés "Moro" y Martín "Loco". Y unos metros mas aallá una placa muy emotiva con la imagen del Cautivo y una poesía muy emotiva de Ismael y su mujer dedicada al padre de este, fallecido también en este escenario en los tiempos en aquellos últimos años en los que recorrer el antiguo Caminito conllevaba un gran riesgo.
 Sin lugar a dudas el momento ágido del recorrido lo marca el puente de Eugenio Ribera, por donde se pasaba antiguamente de paared a pared. Si bien, para no dañarlo, se ha instalado junto a él una moderna plataforma metálica, que antes de su inauguración fue sometido a una prueba de 50.000 kilos de peso sin inmutarse lo mas mínimo.
 Para evitar problemas en este punto, donde en determinados momentos, pueden coincidirdos dos grupos numerosos de personas que circulen en sentido contrario. Dentro del equipo de monitores que controla y vigila permanentemente el Caminito del Rey, tiene a una persona velando permanentemente porque el paso por este lugar se realice de forma ordenada, fluida y si es precioso tranquilizando a las personas que llevan peor el tema del vértigo y que obviamente en este punto se acojonan bastante, sobre todo si sopla un poco de viento.
Una vez que dejamos atrás el puente el subidón de adrenalina es mas quee evidente, así como la sonrisa de muchos excursionistas, mezcla de la alegría de sentirte un ser privilegiado y dejarte embriagar por la belleza, la espectacularidad y la grandiosidad del entorno de este lugar del que tantas veces has oido hablar. En este caso vemos a nuestro Presidente Paco Jaime y a su mujer Rosa "la Primera Dama".
 Cuando el senderista enfila hacia la salida del desfiladero con el embalse de la encantada allí abajo y la Mesa de Villaverde enfrente, siente una inmediata añoranza de lo que acaba de dejar atrás y hasta ganas dan de darse la media vuelta para volver a saborear doblemente lo recorrido, tal y como hicieron varios/as compañeros/as.
 Una última viosta atrás nos permite saborear por última vez las angosturas del desfiladero y los excursionistas desfilando por laa inverosimil pasarela que acabamos de dejar atrás.
 Un último tramo de escaleras ya enfilando hacia la saalida próxima al puente celosía verde de la vía del tren por donde entrábamos o salíamos antiguamente pone fin a este fantástico recorrido.

Al abandonar la pasarela tomamos contacto con un tramo asfaltado e incluso escalonado del Camino que se ha habilitado para facilitar el acceso a los visitantes que llegan desde la entrada sur, Estación del Chorro (Álora).En nuestreo trayecto hacia la barriada del Chorro, a la altura del viaducto de Los Albercones, nos cruzamos con un nutrido grupo de excursionistas, casco en ristre, que sumado a todos los excursionistas con los que nos habíamos encontrado en el último tramo, nos hacía añorar aquella época en que veníamos cuatro gatos, y sólo te encontrabas el típico alemán ó autraliano trotamundos mochilón en ristre, alguna pareja o trío de montañeros con tiendas de acampaña para plantar la tiendaa en el Valle del Hoyo o donde pillara y los dos o tres colegas con los que uno viniera. 
En aquellos tiempos, hasta bien entrados los años 90, podías recorrer largos tramos de pasarelaa sin encontrarte con nadie y cuando te encontrabas con alguien, casi te alegrabas en aquella inmensa soledad, preguntándole si había muchos agujeros grandes mas alante. Buitres, chovas piquirrojas, vencejos, golondrinas, palomas y hasta halcones peregrinos eran dueños y señores del lugar y a veces pasaban junto a tí con insultante descaro y tranquilidad. Pero al ver uno tal aglomeración de excursionistas (de los que también nosotros formamos parte, no lo olvidemos). Uno se pregunta, hasta qué punto afectará a la fauna del lugar este evidente impacto medio ambiental en las aves que habitan los dos desfiladeros y la fauna del Valle del Hoyo, con una media dee 450-500 visitantes cada día; ¿Hasta qué punto compensará convertir el Caminito del Rey en un parque de atracciones, en pos de la presunta mejora de la economía de la Comarca, especialmente Álora, Ardales, Valle de Abdalajís, mas allá de los bares, restaurantes y alojamientos de la zona, que están haciendo su agosto cada día. Porque sí otorgar dos permisos al mes de 15 personas para realizar la crestería del Torreón puede parecer excesivamente estricto y reestrictivo hasta la ridiculez y tacañería mas absoluta de la Junta de Andalucía, 500 personas al día pùede resultar una invasión y casi una profanación del medio ambiente. Hasta el punto de que el ambiente que se respira en los puntos de acceso donde se les entrega el casco a los visitantes es mas propio de un parque dee atracciones o de una feria, que del inicio de una ruta de senderismo o montaña.
¡Ojo, no expresamos esta opinión como una crítica!, sino como lo que estimamos una opinión generalizada y una reflexión en voz alta, de quienes hemos conocido el Caminito en otros tiempos, comparamos cómo lo vivimos en su día, como se vive hoy; y sobre todo porque amamos y respetamos la Naturaleza, nos preguntamos dónde está el límite del denominado Desarrollo Sostenible y a partir de qué número de visitantes se mepieza a explotar la gallina de los huevos de oro.
Y una vez mas aprovechamos para dar las gracias al Ilustrísimo Señor Don Carlos Vasserot (jefe del Servicio de Turismo de la Diputación de Málaga) por su enorme amabilidad y a la encantradora Señorita María Ponce por su eficacia, buena predisposición y el detallazo de haber querido acompañar al Comando Preston en tan histórtica jornada para todos nosotros, disfrutando en exclusividad del Caminito del Rey durante las dos primeras horas de reposado recorrido por este auténtico Santuario Natural.
 3ª parte, De la barriada del Chorro al parque Ardaales por la sierra de la Pizarra
 En la imagen la Jet set de Marbella, el Duque de Juanar y la Duquesa de baqueira Beret llegando a la barriada del Chorro. Donde estaba fijado el siguiente punto de reagrupamiento a las 12.30 en n el bar de Los Platos Rotos. Mientras esperábamos en el bar a que llegara la hora fijada, coches y autocares  fortmaban caravanas, inexistentes hasta hace poco, reavivando el debate sobre la masificación de visitantes. Especialmente los fines de semana.

 No obstante, preferimos centrarnos en la belleza del paraje, atravesando la presa de La Encantada, aprovechamos para fotografiar esta imagen de su central de bombeo y al fondo las paredes de La Pedrera y las laderas de la sierra de Huma en su trayectoria hacia el desfiladero.
 Los aficionados al ciclismo, también deben echar de menos aquellos tiempos en los que estas eran tranquilas carreteras donde no te tenías que preocupar tanto del trasiego de coches y autobuses en ambas direcciones, que se da en la actualidad. Esta previsto que una de las tres etapas de la Vuelta Ciclista España, que se disputan este año en la provincia de Málaga finalicen en El Chorro, concretamente la 2ª etapa, prevista para el 23 de agosto, anunciada como Alhaurín de La Torre-Caminito del Rey, para mayor gloria y difusión del mismo, si bien la meta estará situada en La Mesa de Villaverde. No obstante, las tomas aéreas prometen ser espectaculares.
Por suerte, en nuestro obligado trayecto por carretera entre la barriada del Chorro y la Ermita de Villaverde el transito de vehículos, nos dió algunos minutos de tregua en que  pudimos dedicar algunos minutos para recrearnos con esa imagen absolutamente hipnótica de la salida del Desfiladero, desde donde veíamos el continuo deambular de excursionistas por la pasarela y por el puente cual hilera de hormiguitas multicolores. En esta imagen aparezco junto a mi admirado amigo Manuel Limón, "cañailla" (natural de San Fernando),  residente en Cádiz capital y creador de una de las mejores webs de senderismo en toda Andalucía y probablemente de la mitad sur peninsular. No o la dejéis de visitar: http://www.rutasyfotos.com/ y para los amantes del arte rupestre y la arqueología en Andalucía: http://www.prehistoriadelsur.com/

 La salida del desfiladero es el lugar donde se producía el fenómeno conocido localmente como "El Chorro" y es que, cuando aún no existían las presas del Guadalhorce y Guadalteba, no digamos ya, la del Conde de Guadalhorce, en épocas de fuertes lluvias, las aguas del río Turón, sumaadas a las de los ríos Guadalhorce y Guadalteba, unidas en la junta de ríos, se abrían paso a través de los desfiladeros con una fuerza descomunal, el río crecía en altura de forma espectacular subiendo sorprendentemente entre las angosturas del mismo y a la salida del desfiladero de Los Gaitanes, el agua salía disparada cual gigantesco chorro, con el que los lugareños bautizaron este lugar.

En la imagen, vemos a varios compañeros llegando a la ermita de Villaverde, magnífico ejemplo de arquitectura popular, perfectamente enmarcado en el entorno, donde ya nos esperaba el amigo José Antonio, con un delicioso arroz campero que estaba terminando de preparar justo cuando llegábamos.

 El Doctor Leal (tesorero del Club), recién llegado de su Viaje a Turquía, (se rumorea que con "fondos reservados del club"), hizo las veces de anfitrión sirviéndole el rancho a la fiel infantería prestoniana, donde entre otros, debutaban los sobrinos de Paco El Generoso (todos socios del club en esta jornada):  Joaquín y Javier Molina Castillo, que demostraron muy buenas maneras, tanto subiendo como bajando en un magnífico alarde de forma física.
 Después del arroz, las jarras de cerveza y el cafelito (no hubo tiempo para puros), tocaba lo mas duro, la ascensión a la sierra de La Pizarra, pero la hicimos a un ritmo muy cómodo, siendo la primera parada de reagrupamiento en el collado quee se encuentra al oeste de la cumbre del Castillón de la Ermita o peñón del Cristo.
 Una vez reagrupados en el collado, charla para identificar los hitos mas emblemáticos del entorno e instrucciones para no perderse, ni quedarse cortado, en el siguiente tramo de ascensión entre el cortafuegos y el borde de los tajos del Almorchón, al que nos nos fuimos asomando de vez en cuando, aprovechando para sacar nuevas fotos, disfrutar del paisaje y darle tiempo a la cola, que de vez en cuando optaba por continuar ladera arriba a un ritmo mas pausado.
 En la imagen de arriba: Paloma y Jesús posan al filo de lo imposible, disfrutando de una espectacular panorámica sobre el valle del Hoyo y el entorno de los desfiladeros ya recorridos por la mañana. En la foto de abajo, el amigo Felix Rodríguez Aguilar, remonta los últimos metros de cortafuegos previo al collado del Buitre.
 Desde el collado del Buitre, tomamos un ramal de algo mas de 1, 2 km a la derecha que de forma muy directa nos llevó hasta la cumbre del Convento. En nuestro camino hacia dicha cumbre, mantuve una interesante conversación con el Maestro Manuel Limón "Premio Nobel de Senderismo" que tras numerosas pesquisas, investigaciones y exploraciones en las mas diversas sierras de nuestra geografía, ha lleegado aa la conclusión de que toponimias como el pico del Convento, La Capilla, peñón del Cristo, etc... No quiere decir que en su cumbre o cercanías existiera alguna vez un convento o una capilla, sino que por haber sido lugares donde sí existió una antigua fortaleza o torre de vigilancia en tiempos de ocupación musulmana, en el afán de los Reyes Católicos, la mayoría de los Reyes posteriores y sobre todo la temida Inquisición, le inculcaron al pueblo llano la necesidad de borrar cualquier huella del islam. De manera que la maayoría de las atalayas, antaño presididas por antiguos torreones construidos por los árabes, recibieran el nombre de Santos, Vírgenes, Cristos o lugares relacionados con el cristianismo como la ermita, la capilla, el convento, etc...De aquellos antiguos torreones, castillos, y castillones nos ha quedado también una amplia toponimia en muchas de nuestras cumbres.
 Anecdótas históricas aparte, las vistas desde el pico del Convento, son una auténtica maravilla y una forma muy interesante de complementar esta ruta para darle un toque diferente a la primera parte del Jurásico del pasado año, que en gran medida coincidía con este recorrido por la sierra de La PIzarra.
 En la foto de arriba se observa el ramal de cortafuegos, que recorrimos en un ida y vuelta, desde el collado del Buitres hasta el pico del Convento. Y en la foto de abajo, el grupo regresa tras asomarse al final de otro ramal, que da vistas al entorno de la Ermita y a la Mesa de Villaaverde enfrente.
 En la foto de arriba tenemos una de las vistas mas emblemáticas de la sierra de La Pizarra, en este caso, hacia el embalse del Conde del Guadalhorce, llegados a este punto, tentado estuve de consultar el track del Jurásico 2014, para regresar sobre nuestros pasos. ¡Pero que coño!, sin un poco de emoción, no hay aventura, así que con el Parque Ardales, final previsto de recorrido allí abajo a la vista. Volvimos a poner en práctica el recorrido de "Caminante no hay camino, se hace camino al aandar", poniendo en práctica el instinto montañero por un terreno aparentemente dócil, perto no exento de dificultad, aal llegar aa algunos escaalones formaando por grandes tafonis como el que aparecen en esta foto. También pasamos frente a alguna que no vimos el año pasado. Viviendo este último tramo de descenso cual intrépida aventura donde tampoco faltaron grandes detalles de compañerismo y ayuda a quien la necesito. De hecho, este fue uno de los momentos mas bonitos de la jornaada con unas vistas preciosas del entorno.
 En la imageen de arriba, vemos a Paloma y a Marlem después de dejar atrás uno de los maayores tafonis de este tramo conocido como Los Camoriles, donde de pronto vas caminando por un tramo de ladera aparentemente dócil y te encuentras con un gigantesco escalón, como nuestra amiga Teresa, qque se encuentra allí arriba como un puntito naranja, cual pequeño Corcovado.
 Al llegar a la carretera del Parque Ardales, las fuerzas del "lado oscuro" arrastraban aaa parte del grupo a qquerer seguir por la misma haasta el restaurante El Kiosco. Pero antes, quisimos rubicar la travesía por la orilla del embalse del Conde de Guadalhorce, en la zona conocida como La Isla, a la que pudimos acceder aprovechando que el nivel de sus aguas no estaba muy alto y haciendo la foto de grupo que vemos abajo.
Una curiosa perspectiva desde la zona 4 del camping hacia la casa del Administrador, ponía la guinda del pastel a los últimos metros de esta VIII Travesía del Jurásico "Especial Caminito del Rey" con cervecitas, cafñés, tapas y refrescos en la terraza del Kiosco. 
Esta crónica está especialmente dedicada a todos los compaañeros que han hecho posible esta edición del Jurásico Edición especial caminito del Rey: especiaalmente a Paco Castillo "El Generoso", El Doctor Leal y muy especialmente al Ilustrísimo Señor Don Carlos Vassserot y a la encantadora y super eficxaz señorita maría Ponce.