Pueblos de referencia: Huétor Santillán
Punto de encuentro
recomendado para desayunar (si se viene por la A-92 desde la zona de Málaga o
Antequera): Venta Riofrío o Estación
Los Abades en Loja.
Cómo llegar al inicio
de ruta: Conduciendo por la autovia
A-92 dejaremos Granada, a nuestra derecha, tomando en esta ocasión dirección
Murcia-Almería, es decir hacia el Puerto de La Mora y al poco de dejar atrás la
salida de Huétor Santillán, estaremos atentos porque la siguiente salida es la
nuestra, señalizada con el número o km. 259 - Parque Natural Sierra de Huétor.
Pasamos por debajo de la autovía, giramos a la izquierda y al poco a la derecha
a 300 m. encontramos un ancho carril donde en sus inmediaciones podemos
aparcar. Caso de no haber sitio, unos100 m más adelante de este carril podemos
aparcar en la zona de aparcamientos delante de la Casa Forestal de los Peñocillos.
Distancia aprox.
21 km
Desnivel aprox. subida
600 m
Punto de partida:
Casa Forestal de Los Peñoncillos (1.250 m), acceso inmediato desde la A-92
(salida 259), pasado Huétor Santillán en dirección Puerto de la Mora
(Murcia-Almería), a poco mas de 15 minutos desde Granada capital, por donde no
hay que pasar, si venimos por la A-92 desde cualquier otro lugar.
Punto mas alto: zona
de la Umbría de Polvorite (1.520 m)
Tiempo aprox. 6-7 horas.
Nivel dificultad:
Medio.
Tipo suelo:
senderos y pista forestal.
Tipo de recorrido:
circular (preferentemente en sentido contrario a las agujas del reloj)
Fecha de realización:
sábado 26 de febrero de 2013
Participantes:
Como Maestro de ceremonia en funciones de guía, Manuel Manzanares, una vez mas,
volviendo a hacer bueno su apodo de “El Cartógrafo de su Majestad”, magnífico
conocedor de todas las rutas clásicas y un sinfín de rutas inéditas por la
provincia de Málaga y aledañas como Granada, Cádiz, Córdoba y Sevilla, sin
lugar a duda, uno de los mejores guías de senderismo y montaña de Andalucía,
Maestro de maestros que una vez mas volvió a deleitarnos con una de sus rutas
de coleccionista que superó ampliamente las expectativas de todos los
participantes. Desde Sevilla vino Ilde “El Vendaval del Moncayo” tras un largo
tiempo de ausencia desde que su gran escudero Ignacio “El Soltero de oro” lo
destinaran a Valladolid. Desde algunos puntos del interior de Málaga vinieron:
Rosa “de la Comarca…de Casarabonela”, Celia “La Hechicera du Sao Paulo”, Ani,
Paco y Alberto. Y desde distintos puntos de la Costa: Vicky “la Botánica”, Juan
Antonio Mena “El Elfo de la Malagueta”, Rumualdo “El Trovador de la escuela
Lorquiana”, Mª Jesús, Ilse “La Gacela de la Selva Negra”, Paco Jaime “El
Catavinos”, Juan Ignacio “El Comandante” y aquel día, “jugando en casa” pues le
pilló pasando el fin de semana con su familia en Granada (“Graná”): Iván “El
Terrible”.
A tener en cuenta:
1º) Para quien no conozca bien esta sierra y pretenda
realizar esta ruta le recomendamos nos solicite el track de la misma a: comandopreston@gmail.com, o bien se
documente previamente con mapas detallados del parque, pues si bien hay tramos
que resultan mas que evidentes y fáciles de seguir, hay algunas zonas donde
debemos abandonar los caminos principales, coger varios ramales y pasa por
algunos puntos que se pueden prestar aa confusión, o donde fácilmente podemos
pasar de largo un desvío no señalizado por ninguna baliza de madera o hito de
piedra.
2º) La segunda parte de esta preciosa ruta circular coincide con una de las rutas que se anuncia en el parque como "Sendero cañada del Sereno".
3º) En el tramo posterior a la Fuente de los Porqueros y
Fuente
Grande, el sendero discurre tan cerca de las aguas del recién nacido
río Darro, que tenemos que vadearlo en varios momentos y a poco que haya
llovido en los días previos, tendremos que hacer piruetas para no terminar con
algún pié dentro del agua.
4º)Por la zona donde comenzamos a rodear el cerro conocido
como El Púlpito hay tramos muy embarrados, aunque con un poco de suerte, las
botas se pueden ir limpiando solas tal y como vamos caminando por la nieve que
suele haber en muchas jornadas invernales por la zona conocida como la Umbría
de Polvorite. Dicho lo cual es recomendable dejar calzado y calcetines extra en
el maletero para cambiarnos a nuestro regreso, así como llevar polainas o
incluso calzado extra por si no nos queda mas remedio que caminar por las frías
aguas del recién nacido río Darro
El Parque Natural Sierra de Huétor (declarado como tal en 1989) está situado en
el centro de la provincia de Granada, pero al encontrase muy cerca
del Parque Nacional y Natural de Sierra Nevada que es el que aglutina la
mayoría de visitas de esquiadores y excursionista, sigue siendo un gran
desconocido a pesar de encontrarse situado a escasos kilómetros al norte de la
capital nazarí. Las sierras de este espacio, son muy parecidas al Parque
Natural de Cazorla, Segura y las Villas. El espacio solo tiene 12.428
hectáreas, en su corazón nace el río Darro, que alimenta los estanques, fuentes
y canales de la Alhambra, el Generalife y el Albaicín, para poco después
entregar sus aguas al Genil, que vemos nacer desde la Vereda de la Estrella.
Aunque el parque
recibe el nombre de la Sierra de Huétor, (como pasa con el parque
natural Sierra de Grazalema), en realidad está formado por otras muchas sierras
como por ejemplo son en su caso las sierras de: La Alfaguara, Cogollos,
Diezma, Beas y estribacioines de la sierra de Harana, donde se
encuentran las cumbres mas alta el Peñón de la Cruz (2.027 msnm) y el pico Harana (1.975 msnm), aunque al
encontrarse en el perímetro exterior del parque, concretamente al norte del
mismo. Oficialmente su cumbre mas alta es el Peñón del Majalijar con 1.889 msnm. La mayoría de sus cumbres oscilan entre los 1.100 y
1.675 msnm. Aunque son alturas
modestas si se las compara con Sierra Nevada, a poco que nieve en Granada es
fácil que estas cumbres amanezcan cubiertas de un manto blanco en las frías
mañanas invernales.
El parque abarca parte de los términos municipales de: Huétor
Santillán, Viznar, Alfacar, Cogollos Vega, Nívar, Diezma y Beas de Granada.
Una de las peculiaridades del parque es que se encuentra dividido por la A-92,
que pasa por el puerto de La Mora (1.380 msnm).
A la Sierra de Huétor se la considera un macizo
complejo desde el punto de vista geológico por el origen y la composición
de sus rocas. Está formado por montañas de mediana altitud compuestas
por rocas calizas con formaciones geológicas peculiares. El diferente grado de erosión de los materiales determina su paisaje que
alberga desde impresionantes barrancos, hasta cumbres escarpadas y arroyos de
aguas cristalinas, así como abundantes formaciones kársticas, donde abundan las
cuevas. 
En el corazón del parque nacen los ríos
Darro y Fardes cuyo cauce alto discurre por este sistema montañoso, en el
segundo abunda la trucha, hasta el punto de que se ha convertido en un lugar de
reunión para los aficionados a la pesca deportiva. 
Ambos ríos forman estrechos valles que
separan las verdes lomas, donde proliferan masas
vegetales autóctonas compuestas por encinares
y matorral espinoso. Robles y arces
son también especies relevantes de la zona; así como quejigos en las áreas más
umbrías y de mayor altitud. De la misma manera pueden encontrarse amplias zonas
repobladas con pinos (algunos autóctonos) y coníferas, donde nos sorprenderá
encontrarnos con algunos pinsapos o
hermosos cedros. La presencia de
numerosas especies vegetales exclusivas de este espacio completan su interés
botánico, hay endemismos vegetales de: Arenaria, lantana, centaura y nébeda. 
La fauna es propia del hábitat mediterráneo como: la cabra montés,
garduña, jabalí, ratonero común, gineta, comadreja, tejón, gato montés y zorro,
son especies faunísticas de esta zona.. Entre la avifauna merece destacarse el
ratonero común y el águila real, ésta última de forma muy esporádica.
Para mas información sobre el parque natural Sierra de
Huétor:
Dentro de la red de senderos del parque natural
sierra de Huétor, se encuentran señalizados:
Ruta 1: Sendero de Las Mimbres (a los pies de
la sierra de Arana)
Ruta 2: Cueva del Agua y Cueva del gato (área
recreativa La Alfaguara)
Ruta 3: Cañada del Sereno (acceso por la
entrada del parque, que coincide con la salida 259 de la A-92 y con el que completamos la 2ª parte del itinerario que describimos a continuación.
Ruta 4: cerro del Maullo (inicio desde el
Centro de Visitantes)
Ruta 5: Sendero de las Aves
Ruta 6: Cruz de Víznar
Ruta 7: Barranco de Víznar (inicio en el
puerto del Lobo).
Resúmen de la rutaLOS PEÑONCILLOS -- CERRO DE
LA CRUZ -- RIO DARRO -- CUEVA DE LOS MÁRMOLES -- EL PÚLPITO -- CAÑADA DEL
SERENO
Tomando la salida
259 de la A-92 y recorriendo unos 300 m por la carretera de servicio paralela a
la misma en dirección Huétor Santillán, tomamos la pista que a nuestra derecha
entra en el parque y unos 200 m mas allá, llegamos a la cancela de entrada a la
Casa
Forestal de Los Peñoncillos que quedará a nuestra izquierda, pudiendo
aparcar los coches en la pequeña explanada que allí se encuentra o al margen de
la pista, asegurándonos siempre dejar libre el paso para el tránsito de otros
vehículos.
Desde este punto
la pista de desdobla en dos formando una “Y”. Entre los dos ramales encontramos
un hito de piedra con dos placas la de abajo nos muestra un rudimentario
croquis con las pistas principales del parque y algunos de los lugares mas
emblemáticos y sobre esta otra de “patrimonio forestal del estado”. De manera que tal y como nosotros hemos
llegado, tomamos el ramal de la izquierda (suroeste). Iniciando los primeros
kilómetros de nuestro recorrido con un suave perfil descendente, rodeados de un
denso pinar que nos acompañará de principio a fin de la ruta, junto con otras
especies que añadirán mas magia a este precioso y muy poco frecuentado
recorrido.
Antes de completar el primer kilómetro de recorrido, ya podremos distinguir a
nuestra derecha (norte), algunas cumbres del parque como el Telégrafo de Orduña
o el Majalijar. Conforme vamos girando a la izquierda, cambiando el rumbo
suroeste, por rumbo sur el siguiente hito visual que nos llamará la atención
será, también a nuestra derecha, el cerro de la Fuente Fría, donde vemos la
pista que lo faldea por su vertiente este.
También nos llamará la atención, una antigua alberca de agua
hasta arriba, con su perímetro vallado, para preservar las especies de anfibios que allí
se encuentran, tal y como podemos leer en un panel informativo. 
Y justo después
en una curva del camino, nos encontramos con una de las grandes sorpresas de
este recorrido, varios ejemplares de pinsapo, que en su día fueron plantados en
esta zona de umbría y que ya presentan un robusto porte de mas de 10 m de
altura, que nos hace albergar esperanzas sobre la posible proliferación de esta
bella especie que tan arraigada se encuentra en los parques naturales de la
Sierra de Las Nieves y de Grazalema. 
Poco después de superar un collado desde el que contemplamos
un viaducto de la A-92 allí abajo en dirección suroeste, estaremos atentos a un
ramal de sendero que sale a nuestra izquierda (hemos píntalo con una línea
amarilla mas fina, los tramos de sendero sobre el mapa), que nos lleva hasta el
inicio de la subida al cerro de La Cruz, en este caso lo que sería Cruz de
Huétor Santillán. No confundir con la de Viznar y otras montañas de este parque
o de otras zonas de Granada como la Cruz de Padul (por ejemplo). 
Se trata de un
corto tramo de subida, de poco mas de 100 m de desnivel en apenas 500 m, que
pondrán nuestros gemelos y capacidad pulmonar a prueba. Ni que decir tiene que
las vistas que desde allí obtenemos sobre Huetor en primer plano y las cumbres
de Sierra Nevada al sur, son impresionantes. 
Al suroeste, por encima del mar de
nubes que habíamos dejado a nuestro paso por Loja y que siguieron estando todo
allí plantadas toda la mañana, asomaba la cumbre de la Maroma, por su cara
norte, muy nevada, que tantas veces hemos subido desde el cortijo del Robledal. 
Hacia oeste muy cercana, pero fuera de los límites del parque las tres cumbres
de la Sierra Elvira recientemente conquistada por el Cartógrafo de su Majestad
y apuntada en nuestra agenda como futurible propuesta. Y al norte las cumbres
también nevadas mas emblemáticas del parque , anteriormente mencionadas, que ya
figuran en nuestra agenda para el próximo mes de abril si todo va bien. Afortunadamente
el día fue óptimo meteorológicamente hablando, con cielos despejados, atmósfera
cristalina y temperatura fresca ideal para una buena caminata. 
Antes de abandonar la cumbre nuestro amigo Romualdo nos
sorprendió marcándose una poesía de García Lorca al pie de La Cruz, cuyo
contenido y entonación bien merecieron el aplauso, la admiración y el
reconocimiento de todos los allí presentes. 
Tras lo cual descendimos por donde
habíamos bajado disfrutando de privilegiadas vistas aéreas sobre la localidad
que le da nombre al parque: Huétor Santillán.
Al regresar a la pista, la tomamos a la derecha, en
dirección oeste y en sentido descendente, poco después de dejar a nuestra
izquierda unos pináculos de arenisca, podemos contemplar a nuestra la estridente
cantera de Piedras Blancas y poco después la pista hace un par de cerrados
zig-zags que por unos instantes queda muy cerca de una pista polideportiva y
una balsa contra incendios a su derecha, muy cerca de los pilares que sostienen
el viaducto de la A-92.
Éste es el punto mas cerca del que vamos a estar de la
localidad de Huétor Santillán, en todo el itinerario. El pùnto donde abandonamos la pista por la que
vamos, atrochando ladera abajo, en dirección norte, en paralelo al río Darro, para adentrándonos
en su valle. 
Es el punto situado mas al sur de la ruta, coincidiendo también con el mas próximo a de la localidad de Huétor Santillán, de hecho entre este
punto y las Fuentes de los Porqueros y Fuente Grande, empezamos a cruzarnos con vecinos de esta
localidad, que tienen la sana costumbre de incluir en su rutina salir a correr
o a caminar. 
Una baliza nos recuerda el nombre de este tramo por el que ahora
nos adentramos: “Nacimiento del río Darro”. Donde iremos disfrutando de un
precioso paisaje de valle por el que ahora nos adentramos y que a buen seguro
cambiará de color con cada estación pues largas son las hileras de chopos que
delatan el curso del río, aunque por tratarse de una jornada invernal se
encontraban desnudos de hojas. Y es que otra de los muchos encantos de esta
ruta es que debido a su frondosidad es una de las pocas rutas de montaña, que
podría ser recomendable para realizar en cualquier época del año, incluso en
verano
Nuestro siguiente hito del camino es el lugar conocido como “El
Nacimiento”, si bien, no es el nacimiento del río Darro propiamente dicho, sino
un lugar donde coinciden dos de las fuentes mas importantes de su curso
alto como son la Fuente de los Porqueros y Fuente
Grande, tal y como nos recuerda
un panel informativo. Idílico lugar donde realizamos una parada táctica,
disfrutando de la praderita que allí se ha formado, junto a las
cristalinas aguas del Darro que caen por una pequeña cascaada, los castaños que allí se encuentran y otras
especies características de la vegetación de ribera de las que se hace mención
en el panel ilustrativo como son: alisos, olmos, álamos, sauces, plátanos y
fresnos. Además de otro apartaado dedicado al ciclo del agua y los tramos de un
río. Además de la toponimia del río
Darro, que viene de Dauro, que a su vez en deriva de
“dat Aurum”(da oro), supuestamente en la época de los romanos.
A partir de aquí la pista muere en el pradito donde hemos
hecho nuestra pausa y continuamos remontando el cauce del del río Darro, por un
sendero que se va estrechando, al mismo tiempo que el valle se va estrechando,
casi sin darnos cuenta, hasta que de repente nos encontramos con intermitentes
tramos de desfiladero, que pondrán a prueba nuestra pericia para no terminar
metiendo algún pié en el agua, debido a las numerosas veces que tendremos que
vadear el curso del Darro, que aunque por aquí no es mas que un pequeño arroyo. 
Siendo un dato a tenerse muy en cuenta si vamos a realizar esta ruta después de
unos días muy lluviosos. Para localizar este tramo mas fácilmente en el mapa,
lo hemos pintado con una línea azul y amarilla. Ya que los vadeos salvando el
agua se intercalan, con el angosto sendero que a veces discurre algo mas
apartado del agua, como por ejemplo pasa en el Alto Chíllar (Sierra Almijara).
Una vez que los vados quedan atrás y el sendero
se vuelve ancho y dócil, llevando el cauce del río Darro a nuestra izquierda,
hasta que llegamos a un importante cruce de caminos, a partir del cual nuestro recorrido coincide con el que viene anunciado en el panel cerca del cual aparcamos los coches, anunciando "Ruta de la Cañada delñ Sereno". Encontrándonos con
las siguientes señalizaciones: Centro de Visitantes Puerto del Lobo 6,7 km (por
donde nosotros hemos llegado). “Sendero Cañada del Sereno” por el ramal de
pista que vamos a dejar a nuestra derecha, dirección ESTE y que en suave perfil
ascendente nos llevaría de vuelta a los coches en unos 3 km pudiendo
completarse de esta manera lo que de por sí podría ser una magnífica ruta
familiar de unos 10 km. Pero nosotros no tomaremos por ahí porque lo estamos haciendo en el sentido contrario al señalizado, de hecho, tomaremos el ramal de pista que
sale a la izquierda, dirección NORTE, hacia donde dos balizas nos señalan: Área
Recreativa El Sotillo 26,3 km; y Mirador de las Minas 3,8 km en cuya dirección
(NORTE), seguimos caminando con el sol a nuestra espalda, en perfil ligeramente ascendente. 
Llegando en cuestión de minutos a la altura de un bonito puente de
piedra, que salva las aguas del Darro, que llevamos a nuestra izquierda, al
otro lado del puente nos encontramos con otro panel informativo dedicado a La
Fuente de La Teja:
que por tratarse del manantial mas alto del curso
Alto del Darro es considerado su nacimiento, porque es a partir de aquí de
donde empieza a brotar el agua cuando llegan los meses de verano. Sin embargo
desde las primeras lluvias del otoño a las últimas de la primavera, el agua
llega desde mas arriba, razón por la cual, seguiríamos disfrutando de la
compañía del río Darro en su versión mas extendida, aguas arriba. Al fin y al
cabo, la localización exacta de la mayoría de los ríos suele ser un gran
misterio e incluso puede cambiar de ubicación, si los arroyos que forman la
horquilla de su nacimiento se encuentran muy alejados entre sí, dependiendo de
las lluvias caídas por una zona o por otra.
El siguiente hito será un ramal de sendero que parte a la
izquierda de la pista por la que vamos, ladera arriba en sentido suroeste, que
se comunica con la zona occidental del parque, por ella llegaríamos al Mirador
de Víznar o a la zona de La Alfaguara. Pero nosotros continuamos por la pista,
muy atentos, porque poco después vamos a abandonar la pista momentáneamente a
nuestra derecha para cruzar un pequeño prado e inmediatamente después vadear el
pequeño arroyo de la Majada de Los Mármoles. 
Tras el cual tomamos un sendero en
suave pendiente, que en un corto trayecto nos sitúa en una zona llana, plagada
de pinos, donde puede resultar fácil desorientarse, encontrándonos en medio de
un paisaje tipo “Blair Witch Project”. 
Aunque el sendero continúa adentrándose
por la zona llana, atravesando varias plazoletas, que de vez en cuando se abren
entre los pinos. Es justamente al llegar a la primera plazoleta, yo diría que
inmediatamente después de que el sendero deje de subir y comience a llanear,
cuando debemos estar atentos a un minúsculo ramal de sendero que parte a
nuestra derecha (ESTE) y entre la maraña de pinos, con un perfil prácticamente
llano, salimos a un claro del bosque donde se forma una pradera escalonada en
cuyo peldaño mas alto se encuentra, como en la base de un pequeño roquedo, a
modo de un portal de Belén, la cueva de Los Mármoles.
Que si bien, a simple vista parece ser
mas bien una covacha tipo Cueva del Agua (Sierra de Las Nieves), aunque mucho
mas bajita y de no mas de 15 m de profundidad, tiene una doble abertura, muy
ancha que invita a ser explorada, recibiéndonos con una temperatura muy
agradable y con restos de las estalactitas y estalagmitas que han sobrevivido a
los espolios. 
Por desgracia en este y en otros muchos sentidos las entradas de
las cuevas suelen ser frecuentes víctimas del tercermundismo incívico que
caracteriza a un amplio porcentaje de la población española. 
Teniendo en cuenta
la hora que era y lo idílico del lugar éste fue el lugar escogido para
disfrutar del almuerzo.
Finalizado el almuerzo, regresamos sobre nuestros pasos
hasta la pista, que retomamos a la derecha, para continuar con nuestra
dirección NORTE. Superado el siguiente kilómetro nos encontramos con una curva
de orquilla que durante escasos metros nos pone en sentido conrtrario al que
llevamos, pero inmediatamente recuperamos la trayectoria norte, encontrándonos unos 200 m mas allá un ramal
de sendero que sale a nuestra derecha y que reconoceremos porque en este mismo
punto existe una triple señalización: 
Sendero Cañada del Sereno y centro de
Visitantes Puerto del Lobo 8,3 km (en la dirección por la que veníamos), hacia
donde continúa la pista, dirección NORTE no anuncia nada, si bien enlazaríamos
con una de las pistas principales del Parque que conecta la zona de la
Alfaguara (OESTE), con la zona de las montañas mas altas del parque (NORTE). Y
por último hacia el ramal de la derecha que debemos tomar, señala “Área
Recreativa El Sotillo 24,8 km”, sendero (que volvemos a trazar en color
amarillo sobre el mapa) y que desciende unos metros para salvar las aguas de un
pequeño arroyo, afluente de la cabecera del Darro, por un puentecillo de
Madera. 
Donde combinamos tramos de sendero embarrado con preciosas praderas
nevadas, cuya superficie de manto blanco iba en aumento, conforme nos
aproximábamos a la zona de umbría del emblemático cerro del Púlpito,
majestuoso pináculo, cual cerro Tavizna (de Montejaque) en miniatura, pero que
por su ubicación alcanza los 1.428 msnm y que se yergue
desafiante frente a nosotros, especialmente desde el ángulo donde nos
encontramos con un pequeño panel informativo, dedicado al mismo titulado: “Se
puede vivir sobre las rocas”, donde nos hablan de la vegetación rupícora. 
Ni
que decir tiene que desde esta zona y hasta casi el final del recorrido la
mayor parte del itinerario vamos disfrutando de unas vistas con una luz
privilegiada sobre todo el cordal de los tresmiles de Sierra Nevada desde El Caballo hasta el Picón del Jérez, pasando por el Veleta, Mulhacén y Alcazaba,
sobre los que a veces incluso distinguíamos como la nieve se levantaba con las
fuertes rachas de viento.
Seguimos por el sendero en dirección este, noreste, por un
paisaje muy rocoso que durante un trecho nos recordará a parajes como los de la
Sierra de Camarolos (Alta Axarquía), encontrándonos con algunas marcas de
pintura roja, que nos acompañan durante gran parte de este itinerario para
coleccionistas. De nuevo atravesamos tramos de sendero muy embarrados,
combinado con redondeadas lomas, que si bien en circunstancias normales deben
resultar asequibles, con el manto de nieve que las cubría, ocultando por igual
roquedo y matorral, dificultaban la ascensión en un itinerario que iba ya
camino del km 18 de ruta. Hasta que enlazamos con una pista que debemos tomar a
nuestra derecha (NORESTE). 
Donde nos volvemos a encontrar con 4 indicaciones:
hacia el lugar de donde venimos nos señala: “El Sotillo 23,6 km” y “Mirador de
Las Minas 1 km”y en un ramal que sale a la derecha: Puerto del Lobo 9,4 km y
Cañada del Sereno, en dirección sur, pero nosotros continuamos por la pista en
dirección ESTE, NORESTE, encontrándose nuestro amigo Fran de Campillos con un
pequeño ratón de campo, congelado por el frío en medio del camino. 
Justo en el
lugar donde contemplamos frente a nosotros, allí arriba la caseta forestal del cerro del
Corzo, muy parecida a la que see encuentra en el Pico Lopera o el Salto
del Caballo (vertiente granadina de Sierra Almijara). Cerro cuya base sur vamos
faldeando de tal maanera que éste va quedando a nuestra izquierda. 
Hasta que
poco después vamos a abandonar la pista por la que vamos para tomar un sendero
que sale claramente a nuestra, y que inmediatamente después vadea el arroyo que
hemos ido llevando a la derecha durante los dos últimos kilómetros.
Éste lugar es el enclave mas al norte de nuestra ruta, de
manera que desde el momento que abandonamos la pista para vadear el arroyo
retomamos dirección predominantemente sur hasta regresar al lugar donde
iniciamos este precioso itinerario. 
Remontándo y faldeando las redondeadas
lomas de La Umbría de Polvorite, que haciendo honor a su nombre, no sólo
fue el lugar mas frío que atravesamos del recorrido, sino que se encontraba
completamente nevado, trasladándonos a paisajes tipo “Django Desencadenado” o
“Cold Mountain”.
Llegándonos a encontrar en nuestro camino de vuelta con un
simpático muñequito de nieve que alguien había hecho al pie del sendero. 
Disfrutando durante todo este trayecto (100% de sendero, angosto, pero
perfectamente dibujado) de unas vistas privilegiadas sobre la vertiente norte
del cordal de los “tresmiles” de Sierra Nevada y la Reina de su Media Montaña,
el Trevenque con su piramidal silueta, que también se encontraba nevada. A
pesar de que el pino es el gran protagonista del parque, de vez en cuando se
intercala en este tramo del recorrido con pequeños bosquetes de encina y
quejigos.
Un panel descriptivo en formato
panorámico nos explica los principales hitos visuales que podemos contemplar a
nuestra derecha abarcando el barranco de Los Mármoles, mientras
que mas adelante las ruinas de dos grandes construcciones que llevaremos a
nuestra derecha han servido para ponerle nombre al lugar que aparece en los
mapas del parque como Loma de Los Corrales.
Justo donde el
sendero dibuja una gran herradura y que ya nos anuncia que iniciamos el último
kilómetro de este recorrido, que también reconoceremos al escuchar el paso de
los vehículos por la ahora muy cercana A-92, hasta retornar sin ninguna
dificultad y sin temor a equivocarnos al inicio de ruta donde dejamos nuestros
vehículos al inicio de la jornada, completando una ruta preciosa que nos dejó
un magnífico sabor de boca a todos los participantes. Aprovechando la ocasión
en nombre de todos para darle las gracias a ese guía de lujo que es Don Manuel
Manzanares Morilla “El Cartógrafo de su Majestad” por mostrarnos tan magnífica ruta.
