Entorno: Parque
Natural de las Sierras Subbéticas, declarado parque natural en
1988, se encuentra situado al sur de la provincia de Córdoba en pleno centro de
Andalucía, formando parte de las Coordilleras Béticas. Su superficie abarca
31.568 hectáreas de terreno repartido entre los municipios de Cabra, Carcabuey,
Doña Mencía, Iznájar, Luque, Priego de Córdoba, Rute y Zuheros.
Fue declarado “Sitio de Interés
Natural” en 1927 por la Junta Central de Parques Nacionales tras la visita de
campo realizada por los geólogos reunidos en Madrid con motivo del XIV Congreso
Internacional de Geología (1926), que inició la promoción de su estudio y
protección.
Geoparque de la UNESCO
En 2006 fue reconocido por la
UNESCO como Geoparque de España, incluido en la red europea de geoparques
(European Geoparks Networks) con el nombre Geoparque Sierras Subbéticas
(Subbeticas Geopark) junto a otra treintena de espacios protegidos.
Como principales instalaciones de
atracción turística, el parque cuenta con un centro de visitantes (Santa Rita),
un ecomuseo (Cueva de los murciélagos), varios miradores y nueve senderos. La
geología se establece como base para introducir la diversidad biológica,arqueológica
y cultural del área.
Vegetación
Más de 1200 especies vegetales
están catalogadas en el parque, con unos 30 endemismos, algunos de los cuales
se encuentran amenazados de extinción. Destacan por su abundancia: encinas,
quejigos, arces, almeces, acebuches, lentiscos, retama y romero. Gran número de
arbustos y plantas rupícolas en las zonas de umbría y también son muy
interesantes los hongos, especialmente las trufas, que presentan una gran
diversidad.
Fauna:
Las aves de presa son las especies más características del parque, por lo cual su símbolo es el halcón peregrino. Entre los animales que podemos encontrar con mayor frecuencia destacan: la víbora hocicuda, lagarto ocelado, gato montés, erizo europeo. Águila real, buitre leonado y halcón peregrino, que bien podría ser el logotipo de este parque.
La herpetofauna del Parque es rica
y variada, constituyendo la zona con mayor riqueza y biodiversidad en anfibios
de la provincia de Córdoba. Algunas especies son endemismos ibéricos. Los
urodelos están representados por el gallipato, (Pleurodeles waltl) y el tritón
pigmeo (Triturus pygmaeus). Los anuros son los más abundantes y diversos con
siete especies como: rana común (Pelophylax perezi); ranita meridional (Hyla
meridionalis); sapo común (Bufo bufo); sapo corredor (Epidalea calamita);
sapillo moteado (Pelodytes ibericus); sapillo pintojo meridional (Discoglossus
jeanneae) y sapo de espuelas (Pelobates cultripes).
Relieve:
Sierras y picos
El relieve del parque es complejo y
en él destacan como elementos más significativos las abruptas sierras calizas
que sobresalen sobre algunos valles cubiertos de materiales detríticos: Su
núcleo principal está formado por la sierra Horconera, ella se encuentra el La
Tiñosa, que con sus 1.570 metro que es el techo provincial, y el pico Bermejo
(1.476 metros) y la sierra de Rute, alcanza 1326 m y se encuentra junto a la
localidad de igual nombre. Otras sierras secundarias y periféricas son las
sierras Gallinera y la de Los Pollos cercanas a Carcabuey y Priego de Córdoba,
Sierra de Gaena, Sierra de Jarcas, Sierra de los Lanchares: Con interesantes
formaciones como el Lapiaz de Los lanchares, sierra del Lobatejo (1.217 m),
sierra Alcaide, picacho de la sierra de Cabra (1.219 m), junto a la cual se
encuentra la famosa ermita de la virgen de La Sierra.
Son muy abundantes los fenómenos
tectónicos como: pliegues, fallas, etc. En toda la cornisa Norte del Parque se
observa un frente de cabalgamiento sobre la depresión del Guadalquivir.
Puntos de interés geológico
Entre los principales puntos de
interés relacionados con los fenómenos cársticos se encuentran: las dolinas de
Los Hoyones, el Lapiaz de Los lanchares, Mirador geológico de la Ermita de la
Virgen de la Sierra: En el Picacho de la Sierra de Cabra, el polje de La nava,
el cañón del río bailón, Frente de cabalgamiento subbético. En el límite Norte
del Parque, la famosa cueva de Los Murciélagos muy próxima a Zuheros, los
manantiales de Zagrilla, la serie estratigráfica de la Cañada del Hornillo y la
sima de Cabra de mas de 100 m de profundidad.
La Tiñosa (1.570 m.), techo
provincial, desde la aldea de Las Lagunillas.
Cañón del río Bailón: desde Carcabuey
a Zuheros por el Navazuelo, Fuentefría y cauce del Bailón.
Sendero Botánico "Dehesa de
Vargas"
Sendero de la Nava: desde la
sierra de cabra a Zuheros, atravesando el polje de La Nava, siguiendo el cauce
del río bailón.
Sendero de las Buitreras
Sendero Mar de los Olivos (Ruta
de los Bandoleros): subidas a las sierras de cabra, Lucena y Zuheros desde
cada pueblo.
Vía Verde del Aceite: une
Puente Genil con Linares, pasando por Lucena, Cabra, Doña Mencía y
Zuheros, unos 52 km., conocida
anteriormente como Vía del Tren del Aceite por la antigua línea ferroviaria que
transcurría.
Ascensión a sierra Gallinera desde
la aldea de Los Villares:
Inicio de ruta y cómo llegar: aldea de Los Villares a medio camino pasado Rute en dirección Carcabuey
(misma carretera que para llegar al cortijo Vichira, pero unos 3 km mas allá
del desvío hacia el mencionado cortijo, llevando sierra Horconera a la derecha
de la carretera y La Gallinera a la izquierda).
Nota: Sal con tiempo para llegar bien al punto de
encuentro. Ten en cuenta que después de llegar a Rute y encontrar la carretera
que debes tomar aún quedan unos 20 minutos mas de coche. El último lugar
posible para desayunar antes de llegar al punto de encuentro es Rute.
También se puede llegar desde Lucena, tomando
dirección Priego.
Alojamiento recomendado: Casa
Rural “Posada la Niña Margarita” (Casas de la Sierra Subbética S.L.”) en la
misma aldea de Los Villares, 14811 Priego de Córdoba. Telf. 957.70.40.54, info@casasdelasubbetica.com
Cuenta con un entrañable chiringuito, tipo
chill out, con el impresionante telón de fondo de la sierra Horconera, que
además de ser el colofón perfecto para cualquier ruta por la zona, también
podemos dejar encargada una comida para el regreso de la caminata, dato muy a
tenerse en cuenta.
Punto mas bajo: aldea de Los
Villares (600 msnm)
Punto mas alto: Cumbre de sierra
Gallinera (1.094 msnm)
Desnivel aprox. 500 m
Tiempo aprox.
5-6 horas, según paradas y progresión por la crestería.
Nivel dificultad: Puede oscilar entre media y media alta, ya que su la ascensión por su
redondeada crestería se presta a realizarse a gusto del consumidor, según
apetezca trepar por riscos, o sortearlos por senderos de cabras que normalmente
suelen encontrarse unos metros a la izquierda, tal y como vamos ascendiendo.
No obstante,
la abundancia de roca la hace totalmente desaconsejable para un día de lluvia,
especialmente a la hora de afrontar el empinado descenso por un empinado
tobogán rocoso en zona de umbría que afrontamos, nada mas iniciar el regreso,
una vez que sobrepasamos la zona conocida como El Torcal y El Soto.
Tipo suelo: 20% lapiaces agreste de la crestería, 40%
canchal suave en la zona alta de la sierra y posterior descenso con tenues
sendas de cabra. 40% sendero bien marcado e inicio y final con pista terriza a
pie de monte.
Tipo de recorrido: circular
Fecha: sábado, 13 de octubre de 2012
Meteorología: LLuvia suave entre las 8.30 y 9.00 am de la mañana, dejando
intervalos de cielos nubosos y cielos despejados, predominando en toda la
jornada una sucesión de luces cambiantes y agradables temperaturas con máximas
de 20ºC al mediodía.
Participantes: Desde Sevilla
vinieron: Magda “La Pimentonera de Águilas”, El Indomable Jaime, Javi-National
Geographic, Paco Maravillas y Enrique “El Montañero Indignado”. Y desde
distintos puntos de la Costa del Sol: Ilse “La Gacela de la Selva Negra”, La
Imparable Rosa, Eduardo “El Profe”, Paco Batista, Paco Jaime “El Sabio de
Hortaleza” y un servidor Juan Ignacio Amador.
Mapa: parque natural sierras Subbéticas Cordobesas (Junta de Andalucía).
Bibliografía: Las Mejores excursiones por las Sierras Subbéticas (Edit. El
SENDERISTA).
Hora puesta de sol y ciclo lunar: 19.45 pm, luna llena.
A tener en cuenta:
1º)Absténganse personas con problemas de
vértig o no acostumbradas a caminar sobre grandes bloques de roca y abundante
lapiaz.
2º) El uso de botas de trecking es
prácticamente obligatorio para esta ascensión.
Descripción de la
ruta sierra Gallinera desde la aldea de
Los Villares:
Como la ruta
es corta podemos tomar como punto de partida y lugar ideal para dejar los
coches la misma aldea de Los Villares a la hora prevista, en dirección Carcabuey
hasta, unos 400 m mas allá dejamos a nuestra izquierda una pista que baja hacia
una casa y cuando llevemos recorrido unos 700 m por esta solitaria carretera,
sale a nuestra izquierda, una pista que desciende a nuestra horquilla sobre la
que giramos casi 180º a nuestra izquierda, con respecto a la carretera que
traemos y que en apenas 50 m nos lleva a vadear el arroyo de Los Villares, justo
en la orilla contraria, a la izquierda del camino, vemos unos tubos de plástico
negro, que se utilizan como toma de agua para el regadío de la zona (no tenemos
constancia de que sea potable).
Unos 150 m
mas allá del arroyo la estrecha pista terriza por la que vamos se bifurca
formando una “Y” tomando nosotros el ramal de la izquierda, que ya empieza a
confundirse con las rodadas de tractor y maquinaria agrícola para la recogida
de las aceitunas, pues nos encontramos dentro de un olivar. A continuación gira
a la derecha llevándonos por un pasillo de olivos entre escarpes rocosos. Nada
dejar atrás los roquedos de nuestra izquierda, miramos hacia la alomada cresta
de la derecha y vemos una covacha a unos 100 m de distancia, que nos sirve de
referencia para comenzar la ascensión, abandonando el camino por donde vamos y
remontando las primeras rampasa abriéndonos paso como mejor podamos entre la
abundante retama.
Una vez en
las proximidades de la cueva, o mas bien covacha de a penas 4 m de profundidad
a modo de pequeño refugio, la rodeamos por la izquierda e iniciamos la
ascensión por la crestería que iremos remontando a gusto de cada cual. Pues al
que le gusten las trepadas, tenemos por delante una amplia y variada colección
de grandes bloques y pequeñas paredes por las que se puede trepar fácilmente
debido al gran numero de grietas y salientes, además con frecuencia nos las
vamos encontrando de forma escalonada, por lo general muy dóciles de trepar.
No obstante,
si preferimos, caminar sobre terreno mas firme y seguro, casi todo el tiempo
tal y como vamos ascendiendo, a la izquierda de la crestería, la tierra
pisoteada por el paso de cabras y jabalíes, nos marcan el tenue senderillo a
seguir, facilitándonos una ascensión mas cómoda y menos expuesta a caídas o
resbalones.
Cerca ya de
los 900 m de altitud, cuando el tramo mas rocoso estaba a punto de finalizar,
nuestro buen amigo Paco Jaime, sufrió un pequeño desgarro fibrilar en el gemelo
izquierdo, que a pesar de los intentos de varios compañeros para masajearlo y
aliviarlo, le impidió continuar, molestándole sobre todo el apoyo del pié en
sentido ascendente. Viéndose obligado a abandonar en este punto y renunciando a
que lo acompañara cualquier otro miembro del grupo. No obstante, aprovechamos
la ocasión para hacer la primera foto de grupo del día, dejando constancia del
lugar y el momento.
Al Poco de
despedirnos de Paco Jaime, una vez comprobada cobertura y batería de móviles,
mas un silbato que le prestó el bueno de Paco batista por si acaso… reanudamos
la ascensión, y el abundante pedregal por el que habíamos traído hasta ese
punto, comenzaba a quedar atrás, dando paso a un paisaje mas de estepa, donde el
suelo rocoso ya bastante plano y erosionado se alternaba con abundante esparto
y aulagas, con espacios libres suficientes que nos permitían la progresión sin
ninguna dificultad, a veces tomando la referencia de tenues senderillos de
ganado, a veces directamente campo
través, pero caminando en todo momento como referencia principal sobre la
alomada crestería, llevando los impresionantes tajos de sierra Horconera a
nuestra izquierda SURESTE y a nuestra espalda NOROESTE la localidad de Priego
de Córdoba con su Castillo (imagen de abajo),
a la derecha NOROESTE la línea de sierra menores
que va de la Ermita de Cabra hacia Zuheros y Priego y de frente, en la
dirección de nuestra marcha,
predominantemente SUROESTE la divisoria de aguas ante nosotros
Conforme
vamos llegando a la parte alta de sierra Gallinera, la pendiente se suaviza
bastante, alcanzando una primera cumbre secundaria que con sus 1.027 m., nos
permite disfrutar de las primeras vistas sobre el gran espolón rocoso que
corona esta sierra, pudiendo distinguir perfectamente el cilindro de su vértice
geodésico (1.095 m),así como la espectacular
caída de los tajos de la cara norte, a cuyos pies se encuentran los cortijos de
Barralejo, Molejón y Mirasivienes, rodeados por el mar de olivos que
caracteriza a toda esta comarca al igual que gran parte de las provincias de
Córdoba y la cercana Jaén.
El camino a
seguir se presenta ahora muy dócil ante nosotros por una especie de mullida y
angosta praderita, que a modo de pasillo nos permite una cómoda progresión
hacia la cumbre principal. Hasta que al acercamos a ella, descartada la opción
de la derecha por lo verticales tajos existentes, o la crestería propiamente
dicha que presenta ahora su cara mas agreste con grandes bloques rocosos,
optamos por tomar uno de los ramales de sendero que discurren en paralelo a la
izquierda de la crestería, de vez en cuando hay senderos paralelos, pero como
regla general, nos mantendremos en aquel que se mantengan mas altos, es decir,
mas cerca de la zona de cumbres, a veces se pierden, pero por la vertiente sur,
que es por donde vamos, la progresión no es complicada, a poco que tengamos un
mínimo de experiencia en montaña
Justo antes
de situarnos a la misma altura de la cumbre unos 30 m ladera abajo desde
nuestra posición descendí hasta la entrada de la sima del Tocino, tomando como
referencia una gran cornicabra solitaria. Pero la verdad es que sin el equipo
apropiado, no siquiera pude asomarme a su doble entrada, ya que para ello había
que descender con cuerdas, encontrándose unos 3 m por debajo de la base de la
cornicabra. En esta sima, se han encontrado utensilios del Neolítico como
colgantes, brazaletes, punzones, colgantes de huesos y varias hachas
pulimentadas en piedra de sílex.
Desde la sima llegamos al vértice geodésico (1.095 msnm), en unos
cinco minutos, de corta, pero fuerte pendiente, cruzando una caótica red de senderos de cabra, trepando
por pequeños roquedos, hasta llegar al dócil y angosto pradito, junto al
vértice donde estuvimos almorzando plácidamente, a pocos metros de abundante
tierra removida, también conocidas como camas, que suelen hacer los jabalís,
para buscar comida, al igual que junto al vértice del pico Bermejo. NI que
decir tiene qque desde esta cumbre tenemos unas vistas privilegiadas sobre la
vertiente occidental de la sierra de Rute y Horconera por donde discurrió la
ruta que realizamos el año pasado por estas mismas fechas, así como de la mayor
parte del parque y algunos pueblos de la comarca, destacando: Rute al sur,
Lucena al oeste y Priego al noreste.
Normalmente
tras hacer cumbre en una sierra iniciamos el descenso, sin embargo, una de las
peculiaridades que tiene esta ruta es que continuamos por el cordal, en
dirección SUROESTE, hacia la tercera y última cumbre que tiene esta sierra,
como si de un hacho o triple hacho se tratara. Iniciando un descenso por una
pendiente ligeramente empinada, donde abunda el esparto entre erosionados
placas de caliza y piedrecillas sueltas, tomando siempre como referencia la
divisoria de aguas que es nuestro camino a seguir, hasta que comenzamos a
ascender hacia el último espolón de la sierra, conocido como El Torcal y El
Soto, que podemos afrontar por la misma crestería bastante dócil al principio,
si bien, llega un momento, en que es imposible avanzar por la misma, resultando
lo mas fácil tomar los senderos de cabra que discurren a la izquierda de la
misma, esta vez los que estén algo mas alejados de la misma crestería hasta que
llegamos a una planicie o plazoleta, desde la cual podemos ver a nuestros pies
de izquierda a derecha: el cortijo de La Solana, las casas de Las Veredas, el
cortijo de Roldán y el cortijo de La Umbría.
Podemos
decir que esta plazoleta es el punto de retorno de la ruta, ya que es el lugar
donde giramos casi 180º a nuestra derecha encaminando nuestros pasos hacia la
base de las paredes donde El Torcal, que ahora vamos a llevar a nuestra
izquierda. Tomando como referencia una veredilla utilizada antaño por los
pastores, que va en dirección NORESTE, rodeando la base de la cara norte del
Torcal.
El sendero inicia una bajada suave, pero inmediatamente después
llegamos a una especie de tobogán rocoso, que coincide con una zona de umbría,
donde cualquier persona con vértigo lo puede pasar fatal, ya que la pendiente
es tan fuerte, que incluso haciendo autoculin podemos resbalar. Sin embargo,
yendo siempre tranquilos, apoyando bien los pies y con la mano derecha
apoyándonos en la pared podemos ir bajando poco a poco sin problemas.
Una vez en
tierra firme, siguiendo la sendilla que discurre junto a la base de estos
paredones, unos 100 m mas allá de este empinado descenso, dejamos a nuestra
derecha la sima del Palenzuelo, cuya entrada no podemos ver desde nuestra
posición, si queremos verla, tenemos que remontar unos 30 m por una empinada
loma hacia los pies de las paredes mas altas, tomando como referencia una
especie de abrigo superficial, que parece elevarse como si se tratara de una
puerta gótica, de la que cuelgan guirnaldas de hiedra. Tras este portón gótico
se encuentran las oquedades que dan acceso a la profunda sima. De los
verticales paredones que descienden hasta la entrada de la sima cuelgan encinas
y un gran número de plantas rupícolas, mientras que por debajo de la sima nos
encontramos con una gran cornicabra.
Continuamos
por la base de los roquedos en dirección predominantemente NORESTE, con un poco
de suerte podemos ver halcones peregrinos, buitres o chovas piquirrojas
observándonos mientras descansan sobre las cornisas que se encuentran por
encima de nosotros. Una vez que el sendero nos acerca a la parte alta del
olivar, podemos descender por donde nos resulte mas fácil hacia el mismo llegando
en primer lugar al cortijo de Mirasivienes y continuando por una pista que
desciende entre encinas y olivos hasta
la cortijada del Molejón, continuando por la pista llegaremos hasta la
carretera desde donde regresamos sin dificultad hasta la aldea de Los Villares.
No obstante,
en nuestro afán por no perder el contacto con la montaña, nos mantuvimos
faldeando la ladera, atravesando varias pedreras, caminando en paralelo a la
base de los cortados que llevábamos en todo momento a nuestra derecha, hasta
que una vez rebasada la cortijada del Molejón, distante unos 800 m a nuestra
izquierda, descendimos hasta alcanzar la
pista que lleva a dicha cortijada, pero dejándola ya definitivamente a nuestra
espalda, mientras que caminábamos en todo momento con la sierra a nuestra
derecha. Tan pronto como la pista que llevamos describe una curva de herradura
hacia la izquierda, decidimos abandonarla tomando como referencia un corto
ramal de sendero que salía a la derecha y que rápidamente nos situaba en la
parte alta del olivar por donde habíamos vadeado el arroyo de Los Villares,
regresando al mismo vado que habíamos cruzado unas cinco horas antes, para
salir inmediatamente después a la carretera, caminando ya sobre nuestros pasos,
hasta la aldea de Los Villares, donde nos dimos un pequeño homenaje en el
entrañable chiringuito tipo chil out, Casa
Rural “Posada la Niña Margarita” que recomendamos a todos los excursionistas que
tengan a bien hacer una ruta por esta precioso e interesante sector de la
Subbética Cordobesa.
Preciosa crónica Juani, y espectacular descenso por el tobogán, con lluvia matinal incluida, no le teméis a nada!!
ResponderEliminarAnimo a Paco Jaime!