miércoles, mayo 13, 2009

Ascensión al Camorro Alto, 1.378 m desde el Cortijo de las Ánimas

Ascensión al Camorro Alto, 1.378 m desde el Cortijo de las Ánimas (Sierra Chimenea, el techo de Antequera)
Como ya es costumbre cada vez que vamos a hacer una ruta por el entorno de Antequera el punto de encuentro volvió a ser el hotel Restaurante Casabermeja, situado junto a la gasolinera de la rotonda de entrada al pueblo, donde ya estábamos todos desayunados a las 9.30 am.

RECORRIDO : Lineal con variante de regreso circular: Cortijo de las Ánimas-Puerto de la Escaleruela-Camorro Alto-Puerto de la Escaleruela-Nacimiento de la Villa-Cortijo de las Ánimas
DISTANCIA aprox: 17 KMS
DIFICULTAD : MEDIA
DESNIVEL : 750 MTS
TIPO DE CAMINO : pista terriza, calzada empedrada, sendero, empinadas laderas de canchal con piedra suelta y zona de cumbre torcalillo intercalado con pequeños praditos ideales para el almuerzo.

La Sierra de Chimeneas,situada al Oeste del Torcal de Antequera,es la mayor elevación de la zona,constituyendo un hito paisajistico inmejorable.Aunque queda fueras de los limites del Paraje Natural del Torcal,es una prolongación del mismo,menos karstificada aunque con algunas singularidades muy parecidas al torcal en algunos tramos que nos sorprenderán por su belleza y que la hacen muy recomendable de explorar.

El Camorro Alto es a la Sierra Chimenea, lo que el Torreón a la Sierra del Pinar, es decir, mas que montañas individuales con la típica forma cónica, son en realidad el punto mas elevado de una crestería. Siendo el Camorro Alto una hermosa atalaya sobre la vega de Antequera y las montañas que orlan el curso medio del Guadalhorce, proporcionando al excursionista unas panorámicas excelentes sobre una buena porción de la provincia, junto con la posibilidad de atisbar 5 techos provinciales entre los que podemos distinguir: al Mulhacén con Sierra Nevada (Granada) al este, la Tiñosa (en el extremo oriental de las Subbéticas cordobesas) al norte, la Sierra del Terril y el Peñón de Algámitas (Sevilla) al noroeste y en los días claros: el Torrecilla (Sierra de las Nieves, Málaga) y el Torreón (Sierra de Grazalema, Cádiz) al suroeste.

El inicio de esta ruta parte del comienzo de la pista que nos encontramos a la izquierda de la carretera poco después de recorrer 2 km desde el cruce Antequera-Torcal-Valle de Abdalajís, en dirección a esta última localidad, si bien la totalidad de la ruta discurre dentro del amplio t.m. de Antequera. Al comienzo de la pista nos encontramos con el típico mapa de situación, que nos situa en el lugar donde nos encontramos respecto a las dos sierras que tenemos en frente, como son la sierra del Torcal y la sierra Chimenea, separadas entre sí por el emblemático puerto de la Escaleruela, por donde discurre la ruta que nos viene señalada en este mapa y que se dirige hacia Villanueva de la Concepción, coincidiendo con uno de los tramos mas bonitos del Camino de Santiago por la provincia de Málaga, encontrándonos en algún momento con la conocida concha amarilla sobre fondo azul marino, que durante un buen trecho va a coincidir con la primera parte de nuestra ruta el sendero local SL. A-22 puerto de la Escaleruela, perfectamente señalado con sus balizas de color verde. Hasta la base del puerto tenemos que cubrir unos 3 km de pista, que si bien nos lo podemos ahorrar con el coche, merecen la pena hacer a pie para desentumecer las piernas y calentar los músculos antes de la empinada subida que nos espera. El tránsito por esta pista prácticamente llana resulta verdaderamente bonita con la sierra del Torcal y nuestro objetivo: la sierra Chimenea frente a nosotros, además de su prolongación hacia el este, con otros eslavones del arco calizo central, como la Sierra de las Cabras, Camarolos, etc…

Al comenzar a subir por la serpenteante calzada empedrada podemos adivinar la razón por la cual, denominaron al puerto hacia el que ahora nos acercamos como Puerto de la Escaleruela y es que parece que vamos ascendiendo por una especie de escalera en zig-zags desde la que nos deleitamos de impresionantes vistas de la Sierra Chimenea frenta a nosotros y parte de la localidad de Antequera a nuestra espalda. De repente, una vez arriba el paisaje nos sitúa ante el gran polje de la Nava, popularmente conocido como el Navazo, que separa la sierra del Torcal a nuestra izquierda con la sierra Chimenea a nuestra derecha, hacia la que nos aproximamos caminando en paralelo a la valla metálica que debe quedar a nuestra izquierda y que nos separa de los toros y vacas que desde la distancia nos mirarán con curiosidad, mientras que a la derecha tenemos la base de la sierra que mira hacia el sur y que vamos acompañando en permanente pero suave ascensión, hasta que nuestra senda gana cierta altura y observamos a la derecha, difuminadas sendas un tanto perdidas entre aulagas y canchal que nos indican el camino mas corto y asequible para acceder a la cumbre.

En nuestra ascensión, vamos aprovechando las trochas que nos encontramos por la ladera de la solana, que es por donde discurre la subida, superado un penoso tramo de empinada ladera con bastante piedra suelta y material de espino. Pero pronto el terreno comienza a ser mucho mas estable con suelo firme, tapizado cada vez mas, por abundante hierba que incluso llega a formar pequeñas praderas y grandes rocas entre las cuales se puede caminar perfectamente y es a partir de aquí donde nos acercaremos a unos paredones junto a los cuales comenzamos a encontrarnos cada vez con mayor frecuencia, unos camorros (que es como localmente se le denominan a esas especies de galletas apiladas) al estilo de las que tanto abundan en el vecino Torcal de Antequera, en tramo de anticumbre esta compuesto por una bella ladera con algo de prado que se intercala con los torcalillos que rodean la cumbre pretendida, que nos es otra que el Camorro Alto, con sus 1.378 m de altitud snm. Al que podemos acceder mas fácilmente desde su vertiente oriental, pero si se va con tiempo y no tenemos amenaza de lluvia o mal tiempo es recomendable rematar a través de un collado, por su empinada ladera occidental, pudiendo asomarnos con mucha precaución y respeto a los imponentes cortados que hay en las inmediaciones de la cumbre, y que dejarán maravillado al senderista ó montañero mas exigente, no por casualidad estas paredes son un auténtico santuario para quienes practican la escalada. Tan emblemático lugar, no ha estado exento de algunos incidentes dramáticos como atestiguan las abundantes cruces e inscripciones que nos encontramos en esta preciosa cumbre, donde tampoco podía faltar una placa al mítico guarda Diego Monea, posiblemente la persona que mas amplios conocimientos haya tenido jamás del Torcal de Antequera y todo su entorno.

Además de las sierras anteriormente mencionadas podremos distinguir perfectamente: al Nordeste la Sierra de Rute y la de Archidona; mas al Este, Camarolos y la Tejeda, con Sierra Nevada detrás. Hacia el mar,Almijara con Comares por delante y los Montes de Málaga hacia el Sureste. Al sur y suroeste Málaga capital con su hoya, la Sierra de Mijas, Alpujata, Sierra Blanca y Canucha, de Las Nieves, Prieta y Alcaparain,con la Sierra de Grazalema por detrás. Al Oeste, en preciosa sucesión, la Sierra del Valle de Abdalajis, monte Huma y Castillón de Teba o Peñarrubia, con los embalses asomando entre ellas y las tierras de Bobadilla y Fuentepiedra con su famosa laguna mostrando el aspecto mas espectacular que recordamos haber visto en muchos años, gracias a las abundantes lluvias de este invierno, que haciéndose extensibles al primavera, amenazaban con volver a hacer acto de presencia en esta jornada de cielos cubiertos e intermitentes rachas de viento que nos obligaron a buscar refugio en una pequeña pradera, pocos metros al este de la cumbre, disfrutando de un apacible almuerzo, al que tuvimos que poner fin antes de lo que hubiésemos deseado tan pronto como las primeras gotas comenzaron a hacer acto de presencia.

La apremiante lluvia que comenzaba a caer sobre nosotros en la praderita cimera en la que nos encontrábamos, nos obligó a emprender el descenso sin demora por el mismo tramo por el que habíamos subido, cuestión no tan fácil como pudiera parecer por la inexistencia de sendas claramente marcadas, que de hecho nos obligó a hacer una pequeña rectificación, con el espectacular enclave del Navazo a nuestros pies, donde se puede apreciar la doble fractura en las calizas que se aprovechó para edificar el cortijo del mismo nombre y tras el cual contemplamos la increíble masa pétrea del Torcal. Poco antes de regresar a la base junto a la alambrada por la que volvimos a caminar en sentido contrario al de la ida, nos reagrupamos en el puerto de la Escaleruela, donde a penas nos demoramos debido a la persistencia de la lluvia, que aunque no era demasiado fuerte amenazaba con comenzar a apretar de un momento a otro.


Una vez en la pista terriza a la que regresamos tras descender por los zig-zags de la calzada empedrada de la Escaleruela, a punto ya de tomar el desvío por el que teníamos previsto desviarnos para visitar uno de los rincones aún por descubrir para muchas gente que es el Nacimiento del río de la Villa ,a las faldas del Paraje Natural de El Torcal, comenzó a llover con fuerza y dado que la mayoría no íbamos debidamente pertrechados, tal vez por un exceso de confianza regresamos a los coches desandando el mismo tramo de pista que habíamos recorrido al principio de la jornada. Ni que decir tienen que este lugar queda pendiente de visitar para una próxima ocasión, pues resulta innegable la importancia del citado nacimiento, donde brota de forma natural el agua que abastece a Antequera.

Esta ruta fue programada por los compañeros del Grupo de Montaña de Estepona (GRUME), siendo nuestro ínclito amigo Manolo, también conocido como el Tritón de la Chorreras o Dersu Uzala, el coordinador y guía de la misma. Tarea que viene realizando con varios grupos senderistas de Málaga, Sevilla y Cádiz en los últimos años de forma totalmente altruista, demostrando amplios conocimientos que abarcan desde las sierras mas conocidas y emblemáticas hasta las mas recónditas e inéditas, además de ser una magnífica persona y tener grandes cualidades y conocimientos en ramas muy diversas del saber y sin embargo largo tiempo en paro, como muestra de lo injusto que es nuestro sistema en esta España nuestra donde hay tantas mentes privilegiadas completamente desaprovechadas. Además de varios compañeros de GRUME, vino Carmen, la mujer de Manolo mas conocida como Galadriel, impresionante montañera donde las haya, Maribel, la Sirenita del río Cebollón, Eduardo Campos el Profeta del tajo Gómer que pronto será un hombre libre, el incombustible Valentín-el Retorno de Séneca y dos de los compañeros con los que había coincidido el día anterior en nuestra inolvidable ruta del Salto del Caballo y Piedra Sillada: Rafa Márquez- el Aristóteles de la Senda y Paco Domínguez el Reportero de las cumbres. Mas un servidor que escribió esta crónica apoyándose en la ficha descriptiva que nos había enviado el Tritón en los días previos para informarnos sobre la ruta.

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