lunes, noviembre 22, 2010

VI Travesía paisajística Valle del Genal

VI Travesía paisajística Valle del Genal

Sábado 20 de noviembre 2010

El lema: Entre los valles del Genal y Guadalmansa, el paisaje que nos rodea nunca cansa

Pujerra-Jubrique-Genalguacil

Recorrido: lineal de 22,1 km

Dificultad: Alta. La mayor dificultad estriba en las ascensiones de Pujerra al Jardón y de la Pasá del Monardilla a Benajarón. Utilizaremos carriles, vías de saca, cortafuegos y senderos.

Desniveles: Ascenso acumulado: 1.117 m. Descenso acumulado: 1.347 m

Máxima pendiente: 31,9 %. Mínima pendiente: -27,4 %

Altura mínima: puente sobre el río Monardilla 369 m.

Altura máxima: monte Jardón 1.158 m

Los guías: Rafa Flores “El mago Gandalf de la Serranía” coordinador de dicha travesía encabezando la marcha, Herminia Carballo “A Meiga da rías Baixas” de enlace y Salvador Moreno “Geyperman Salvador” como guía de cola compartiendo la función con José Antonio “Blackmountain”.

Participantes: alrededor de 50 entre los que estuvieron, además de los ya mencionados: Juan “El Coloso de Casarabonela”, Lourdes Del Río, Yoli “Como corre”, Isaac “El Pirata de la Pata de jamón”, Tatiana “Ginger”, El Indomable Jaime, Juan Luis España “Husvond”, Victoria Beltrán “La Princesa Druida”, Juan Antonio Mena “El Elfo de la Malagueta”, Andrés Noel González “El Gran Maestre”, Mónica, Ilse “La Gacela de la Selva Negra”, Salvadora Rivas, Agustín Flores, “La Gacela de Villamartín”, Magdalena Mayor “La Pimentonera de Águilas”, Remedios Gallego, Carlos Tapia “El Retratista de Atardeceres y Amaneceres”, José Antonio Luque “El Vigilante de la playa”, Paco Jaime “El Sabio de Hortaleza”, Maria Andrea Rivera “La Chilena”, “La Rosa de la Comarca”, Isidoro Olivares “El Ilusionista”, Salvador Herrador, Fernando Durán, Paco Domínguez “El Reportero de las Cumbres”, Teresa Rodríguez “La Doctora Cole”, Rafael Márquez “El Aristóteles de la Senda”, Miguel Becerra “El Maestro Jedi”, Reinaldo “El Senescal de la Bahía”, Manuela “La Dama de Hierro”, Severo “El Artesano del GPS”, Bernardo “El Curtidor de Ubrique”, Juan Carlos Bernal “El Motorista Fantasma”, Ana María Garcia “La Silenciosa”, Paco Leal “El Doctor Leal”, María Díez, “La Rosa de Manilva”, Juan Antonio “El Señor de los Cahorros”, Silvia Mérida, Carlitos “El Poeta Matemático”, etc…

1ª parte, de Pujerra a Jubrique (Variante de la Ruta 49 del Libro Valle del Renal guía del Excursionista en sentido inverso al descrito en la pág. 399)

Repartidos los mapas y dada la charla a la entrada de Pujerra iniciamos la caminata bajo un cielo completamente cubierto de nubes bajas a cuya altura no tardaríamos en llegar remontando las empinadas calles del pueblo que en breves minutos nos pusieron en la antigua vereda de Estepona, donde el grupo caminaba a buen ritmo por la pista cubierta por una gigantesca alfombra de hojarasca, erizos de los castaños y alguna que otra seta digna de ser fotografiada, entre monumentales troncos centenarios con los que nos hicimos la foto de grupo, para poco después tomar una variante que nos llevaría hasta la cooperativa de castañas, donde se hizo una breve parada de reagrupamiento para tomar un tentempié y de camino sacar los impermeables, pues empezaba a caer una lluvia fina que nos acompañaría la mayor parte de la jornada.

Poco a poco íbamos dejando atrás la zona de castaños, que tras las últimas lluvias y sobre todo después de varios días de viento ya se habían desprendido en gran medida de sus hojas, encinas y pinos comenzaban a ganar protagonismo conforme íbamos ascendiendo, por la divisoria de vertientes que daría vistas al Mediterráneo a nuestra izquierda y espectaculares vistas sobre el Valle del Genal a la derecha, que no pudimos ver, porque antes de ranos cuenta ya estábamos caminando completamente inmerso entre las nubes, con las cámaras bien guardadas sin ser utilizadas en un largo trecho del camino y comentando entre bromas, que la ruta pasaba a convertirse en paisajística intuitiva. Tras un par de duros repechos, al mas puro estilo tour de Francia coronamos el monte Jardón 1.158 m, donde nos hicimos la correspondiente foto de grupo en la que siempre faltan los reporteros de leyenda que se prestan a inmortalizar el momento. Por primera vez en todas las ediciones del valle del Genal realizadas hasta la fecha se coronaba una cumbre señera, pero paradójicamente estando mas altos que nunca no se veía un carajo.

Entre pinos, encinas, alcornoques, castaños, algarrobos y algún que otro roble disperso, proseguimos este paseo entre las nubes predominantemente en descenso alternándose con algunos llanos y pequeños repechos, mientras pasábamos por el puerto de la Fuente del Corsito, Sillada de Maria Antonia y por fin el descenso a Jubrique, donde por primera vez a lo largo de la jornada comenzábamos a disfrutar de amplias panorámicas, en este caso sobre el valle del río Monardilla, donde el dorado de los castaños se alternaba con los verdes de las encinas y alcornoques. Hasta Jubrique se había igualado prácticamente el tiempo empleado en la jornada preparatoria, sin embargo, el paron de casi una hora de almuerzo de Jubrique nos dejó congelado a mas de uno, que un día después estamos a base de frenadol y colacao calentito con miel.

2ª parte, de Jubrique a Genalguacil (Variante de la Ruta 50 del Libro Valle del Renal guía del Excursionista en sentido inverso al descrito en la pág. 405, tomando como referencia el PR. A-241)

Sobre el mapa el trecho que nos restaba entre Jubrique y Genalguacil, a penas llegaba a una tercera parte de lo que ya habíamos recorrido entre Pujerra y Jubrique. Sin embargo, aunque el chirimiri no nos daba tregua, las nubes se elevaron lo suficiente para permitirnos disfrutar de la espectacular paleta de colores que envuelve al valle del río Monardilla en esta época del año y desde las inmediaciones del puente de madera que uno a uno fuimos cruzando, no hubo cámara que quedara sin desenfundar para inmortalizar el bellísimo paisaje en el que estábamos inmersos, rodeados de helechos rocas y muros de piedra cubiertos de musgo, como si estuviéramos en el norte, la hierba resplandecía por todas partes y los amarillos y dorados de chopos y castaños, contrastaban con el verde de encinas, alcornoques, olivos, almendros y una gran variedad de árboles que disfrutan de un microclima perfecto en este valle mágico por donde comenzábamos a ganar altura camino de Genalguacil por el PR. A-241, hasta que a la altura de una casa, después de que el sendero se haya convertido en pista, abandonamos la misma, por otro ramal de sendero, señalizado por unas flechas blancas, que un extranjero afincado en esta zona, se ha dedicado a señalizar.

Entre muretes de piedra, fuimos ascendiendo en zig-zag hasta llegar a un mágico bosque castaños, que a diferencia del de Pujerra, aún se encontraba en su esplendor, de hecho, la mayoría de castaños aún tenían hojas verdes y amarillas, que entre las intermitentes neblinas, hicieron las delicias de todos los amantes de las fotografía, disfrutando de las últimas vistas de Jubrique, ya muy por debajo de nosotros, rodeados de castaños y setas de todo tipo entre las que ni siquiera faltó, la famosa seta roja de los gnomos. Hasta mas allá del puerto del Zorro, la ruta entre castaños se convirtió en un auténtico espectáculo visual, iniciando ya el descenso hacia Genalguacil, encinas centenarias de un porte impresionante, se convertían en las grandes protagonistas del último tramo de esta travesía, donde rojos zumaques encendidos, parecían hacernos un pasillo de honor hasta entrar en las calles de Genalguacial, donde llegamos a la hora prevista. Disfrutando de sus fuentes y escultura conforme atravesábamos esta singular localidad. Así como de un inolvidable atardecer donde a modo de recompensa por todo lo que no pudimos ver en el primer tramo de la travesía, la meteorología nos regaló un paisaje espectacular, donde los rayos del sol se filtraban entre unas nubes cortadas, contemplando unas luces y sombras, que multiplicaban los colores del paisaje, en constante cambio tal y como las nubes se iban moviendo en lo que fue el mejor colofón para aquella jornada, por otra parte genuinamente otoñal al 100%.

4 comentarios :

  1. Magnífica crónica Juani. Si hubiera sabido lo del homenaje, habría ido con el resto de amigos. De todos modos, me uno a ellos desde la distancia. Te mereces todo lo mejor.

    Un fuerte abrazo

    Rafafló

    ResponderEliminar
  2. Rafa, viniendo de tí ese comentario. Me reconforta y llena de alegría, pués por circunstancias de falta de tiempo esta vez la he hecho cortita. Querido maestro, ¡un abrazo y muchas gracias por tus palabras!.
    Juani

    ResponderEliminar
  3. Se ve que el homenaje estaba tan guardado que no nos hemos enterado mucha gente. Por lo menos el que escibre. De todas formas enhorabuena. Los demás también te apreciamos.
    Un saludo Juani.

    ResponderEliminar
  4. Querido amigo Carlos:
    Estoy seguro de ello, fíjate si estaba guardado, que todavía sigo sorprendido.
    Un abrazo y gracias por tus amables palabras.
    Juani

    ResponderEliminar