Ascensión al Huma por la vía Mábel (Arista Sur)

Esta ruta coincidión con la XIII Travesía del Jurásico EL CHORRO 2020:

Ascensión al Huma por la dorsal Sur, “Vía Mábel”
Distancia aprox. a recorrer: 12 km  

Desnivel aprox. de subida/bajada: 1.074 m
Dificultad: Muy Alta
Principales escollos: La ascensión por la Arista Sur del Huma, requiere de una durísima ascensión por la zona mas empinada de la Pedrera del corredor del Sabucón hasta la misma arista. A lo largo de la ascensión las vistas a nuestra espalda son impresionantes, así como cuando alcanzamos la arista, que al principio es ancha y ofrece seguridad, hasta que llegamos a la denominada “Vía Mábel”, donde tendremos que afrontar tres pasos por tres corredores rocosos, técnicamente fáciles, pero muy expuestos al vacío, para lo que se recomienda llevar cuerda de 8-10 m y un arnés para pasar con mayor seguridad, hasta venir a salir a un embudo rocoso de zona mixta (roca y mucha vegetación), que ya nos devuelve a terreno seguro.
Track de referencia:

 https://es.wikiloc.com/rutas-alpinismo/arista-sur-del-huma-por-la-via-mabel-47319481

Tiempo aprox: 7-8 horas   

Punto más elevado: Monte Huma (1.191 msnm)
Tipo de ruta: Circular     

Tipo de suelo: pista forestal al inicio y final, senderos terrizos y pedregosos, pedreras muy descompuestas y sobre todo mucho lapiaz a partir de la zona de arista, combinado con algunas zonas de tierra y muchas piedrecillas descompuestas)

 Participantes: Marga, Marcelo, Jorge, Ana, Rafa, "El Hombre que núnca estuvo allí", Roberto, Los Maestros alpinistas Andrés Server y javier fernández "Pilito", nuestra guía Mábel "mas libre y salvaje que núnca" y un servidor que pasaba por allí: Juan Ignacio Amador.

Breve descripción de la ruta:

Iniciamos el recorrido desde la histórica Estación/apeadero del Chorro, en sentido contrario al que lo hacen los excursionistas que finalizan el Caminito del Rey, pasando junto al Camping, la antigua Iglesia/escuela que dejaremos a nuestra derecha, mientras las aguas del embalse de la Encantada discurren a nuestra izquierda con la famosa tubería que lo comunica con el vaso comunicante del embalse superior, construido sobre los cimientos de parte del asentamiento de Bobastro, a principios de la década de 1970, algo que no se habría permitido en la actualidad.

 Inmediatamente después de dejar atrás la Iglesia-escuela, donde se daba misa cada domingo para las familias de los obreros de las presas y se les enseñaba a leer y a escribir a sus hijos entre la década de 1920 y 1960, llegamos al monumental viaducto de Los Albercones, por debajo del cual vamos a pasar, abandonando la comodidad de la pista que llega hasta la salida/entrada del Caminito del Rey, y tras una fácil trepada, cruzamos el barranco del Sabucón, iniciando un pronunciado tramo de ascensión que nos llevará en primer lugar a pasar cerca de unas casas trogloditas habitadas por hippies y mas adelante un rudimentario mirador con vistas hacia la entrada/salida del Desfiladero de los Gaitanes.

Desde donde tardamos poco en acceder a la Pedrera del corredor del Sabucón que iremos remontando por un tramo muy penoso con bastante piedra suelta, que celebraremos con alegría cuando salimos de ella, aunque ahora toque encarar unas laderas tan empinadas, que salir rodando para abajo, supondría una caída de muchos metros de tobogán. 

Eso sí, las vistas a nuestra espalda con las agujas calizas de La Pedrera y todo el entorno del tajo y embalse de la Encantada y la Mesa de Villaverde son inolvidables, desde un ángulo de visión donde muy pocos han estado. 

Hasta que llegamos a la divisoria de aguas de la dorsal sur del Huma, viniendo a salir a un precioso e inverosímil paso de montaña, que en esta zona de Málaga se conocen como "Portillos" y que parece haber sido excavado en la misma crestería a modo de pasillo. A pesar del gran conocimiento que tienen de la zona Andrés Server o javier Fernández, no recordaban el nombre de este "Portillo", por lo que al día siguiente le trasladé mi consulta al Gran Maestro del Chorro: Clemente González, que me respondió lo siguiente: "No recuerdo bien el nombre de ese portillo, lo tendría que buscar, lo que si te puedo decir es que esa vereda se llamaba Vereda de la Sierra del Chorro, que discurre o discurría desde la Casa Forestal en Cerro Pardo, por la cañada de Tosaires, sierra Llana, portillo del Tajo de Ballesteros y pasaba por los cortijos del Manco, Madroño, Castaño. Remonta hasta la cresta del Huma y baja al valle del Sauquillo (así se llama el valle, Saucón o Sabucón (este nombre viene del sauco, árbol que habría en el cortijo), como dicen por aquí, es el cortijo en ruinas que existe entre el cortijo Campedrero y la fuente Cabello) y desde el valle hasta El Chorro. Fue un proyecto que tenía en mente: recorrer toda esa vereda y documentarla, desde el principio hasta el fin. Lástima que mis "cuartos traseros" no me respondan ya como antaño." Tras lo cual le di las gracias por su magnífica aportación y me ofrecí a retomar su proyecto de documentar aquella antigua vereda, que por ese portillo sobre la cresta del Huma se mantiene impecable.

El caso, es que, una vez en la cresta del Huma, ya podemos dar por finalizado el tramo más extenuante del recorrido y bien merece la pena recrearse con todo lo descrito anteriormente, a lo que le podemos sumar más vistas privilegiadas hacia el Valle del Hoyo con la minúscula silueta de senderistas caminando como hormiguitas por el sendero oficial, bajo los imponentes tajos del Almorchón, tal, tal y como van dejando atrás la salida del Desfiladero del Gaitanejo, así como de los Tajos Ballesteros y otros hitos orográficos y sierras de gran belleza.

 Una vez recuperado el resuello, será el momento de hilar muy fino y cuidar mucho nuestros pasos para afrontar tres pasos que consisten en tres espolones rocosos que requieren de una pequeña trepada y destrepe, técnicamente sencillos, pero con algún que otro paso de fé y una escalofriante caída a la derecha, debiendo hacerlo siempre en compañía de personas muy expertas y sin padecer vértigo. Lo bueno, es que la mayor parte del tiempo estas trepadas son escalonadas y parcialmente protegidas por un canalón que nos ofrece una cierta seguridad.

Una vez que dejamos atrás los pasos mas aéreos, debemos afrontar un último canalón o chimenea, bastante frondosa por el matorral predominante que consiste en un terreno mixto, donde la roca esta parcialmente oculta por el matorral, pero debemos asegurarnos muy bien que las rocas sobre las que nos apoyamos no cedan con nuestro peso, porque en este mismo punto fue donde Mabel tuvo el incidente a finales de octubre 2019.

Superada la canal verde, la dorsal del Huma comienza a ensancharse progresivamente, técnicamente ya hemos dejado atrás la parte mas técnica, pero todavía nos queda un trecho de una media hora de lapiaz, que salvaremos con mayor rapidez caminando en paralelo, unos 20-30 m a la derecha de la dorsal, por un terreno algoi mas despejado, hasta llegar al cruce de balizas, donde ya enlazamos con el tramo del PR. A-390
por donde suelen llegar los senderistas que suben por la falla del Campedrero y desde donde se puede continuar hasta la cumbre por la misma dorsal.

Pero una vez aquí merece la pena desviarse hacia la izquierda, vertiente Oeste de la montaña, para continuar nuestra ascensión hacia los pies del tajo del Estudiante, preciosa estratificación que llevaremos a nuestra derecha, hasta encontrarnos con una chimenea a través de la cual realizaremos una sencilla trepada que nos conduce al que en su día bautizamos cariñosamente como el Mirador de Valentín. Sin lugar a duda, otros de los hitos mas emblemáticos del recorrido.

Desde el Mirador de Valentín, hasta el vértice geodésico tan sólo nos resta un dócil paseo en suave ascensión paralelo a la dorsoal, o directamente por la misma, donde no será raro encontrarnos con algún fósil de amonite.

Para emprender el descenso, optamos por descender siguiendo el trazado del
PR. A-390 "Circular Sierra del Huma" hasta las inmediaciones del Campedrero, domnde llegamos después de bajar por la escalonada falla del mismo nombre, donde hace pocos años instalaron un pasamanos de acero con buen criterio en una zona donde la caliza ha quedado muy pulida debido al tránsito de muchos senderistas en su subir y bajar, pues este punto del itinerario, ya forma parte de la versión clásica de la ascensión del Huma desde El Chorro.

Una vez que atravesamos el pequeño mar de palmitos gigantes en la base de la falla, enlazamos con el camino del cortijo del Campedrero, pero, en vez de descender hasta éste, nos desviamos ligeramente a nuestra izquierda, tomando como referencia el perímetro del pinas que delimita las tierras de labor plantadas de cereal, alrededor de la cual fuimos pivotando hasta enlazar con el sendero balizado con líneas blancas y verdes de "S.L" que nos lleva sin margen de error hasta el collado que nos deja frente al emblemático pináculo que marca la zona mas alta de las denominadas Escaleras Árabes.

Antes de perder de vista el Huma a nuestra espalda, merece la pena echar una última mirada para recrearnos con los impresionantes plegamientos de este coloso calizo. Desde nuestro paso junto al pináculo donde en su día colocamos una placa homenaje a Valentín, fuimos testigos de una inusitada afluencia de escaladores para esas horas de la tarde y en el tramo final de descenso, nos encontramos con parte del equipo de jueces que nos infiormó que se ese día había tenido lugar un rally de tramos de escalada por parejas, con las que nos fuimos cruzando en esa zona y en mayor afluencia cuando llegamos a la Estación del Chorro, en cuyo bar, brindamos todos juntos tras haber disfrutado de esta preciosa ruta de montaña, cuyos últimos kilómetros completamos atravesando el pinar del haza del Río, atrochando todas las curvas que salvan el sinuoso trazado de la pista que se construyó para transportar las piedras de la cantera que hay en la base de los Castillejos y otra mas arriba cercana al Puerto de Flandes, hasta el curso del río Guadalhorce, para lo que fué la construccción de la presa de la Encantada a principios de la década de 1970.