Ascensión al Peñón de Gibraltar por las Mediterranean Steps

Entorno: Reserva Natural Peñón de Gibraltar

Como en ocasiones anteriores desayunamos por el camino en el Bar Peña, Av. J. Martín Méndez Nº10, Polígono Industrial Estepona (junto a la autovía). Teléfono: 952.79.44.41

Localidad de referencia: La Linea de la Concepción ( Cádiz)

Recorrido: Circular

Longitud aproximada: 15 kms
Desnivel aproximado ascenso y descenso: 500 mts
Dificultad: Media (El sendero de Las "Mediterránean Steps" no es apto para personas que no estén en buena forma física, que no tengan ropa y calzado deportivo o que padezcan de vértigo).

Tipo de camino: Zona urbana asfaltada, desde la pista del aeropuerto, hasta las calles principales o la angosta carretera de acceso a la parte alta del Peñón, además del escalonado y pedregoso sendero de las Mediterranean Steps.

Fecha y meteorología: Sábado 22 de septiembre, pero las nubes predominantes arrastradas por el viento y el bochorno de levante, nos chafó las vistas durante todo el trayecto por las Mediterranean Steps que es el tramo más espectacular de este recorrido. Hasta bien avanzado el descenso ya por la tarde, los cielos no terminaron de abrise encima de nosotros y es por ello que debo aclarar que hasta ese momento, todas las fotos que aparecen con cielo despejado, son fotos de archivo.

47 Participantes (según lista facilitada por nuestro guía Don Manuel Manzanares):

Pepe Pateador, Rosa, Emilia, Luis Boutín, Miguel Fortes, Diego Linares, Inma Castillejos, Ángel José Miranda, Manuel López, Isabel Bedoya, Pepi Pérez Muñoz, Juan Miguel Moreno Partida, Pedro Arenas, Pepe Guerrero, Julio Peláez, Conchi Moreno, Antonio López, Isabel Hurtado, Antonio Pascual, Mercedes Godoy, José Manuel Vázquez, Marita, Mabel Hidalgo, Fernando José Fernández Martin, Josefa Rebollo, Alejandro Germán, Mariví (Rincón de la Victoria), Ana (Torrox), Manuel González Luna, Isabel Torres, Marcos Parra, Sancho, Carmen Pérez Galisteo, Pepe Valenzuela, Paco Gutiérrez, Antonio Francisco, Ana Martínez, Manuel Álvarez, Ana Quijano Lombardo, Miguel Puerto, Mari Reme Aranguez, Manuel Moreno Ruiz, Isabel Maria Vega González, José Luis García Criado, un servidor: Juan Ignacio Amador (que suscribe esta crónica). Y nuestros guías de lujo: Doña Carmen Cabello "Galadriel" y Don manuel manzanares "El Cartógrafo de su Majestad".
Bibliografía: Diario de "La Voz de Cádiz", "Cadizpedia", http://www.visitgibraltar.gi/, el mapa guía que compré en la Main Street y mis viejos apuntes de mi época de Turismo.
A TENER EN CUENTA: :

1º) IMPRESCINDIBLE LLEVAR EL DNI 

(Según el día o la hora para entrar no suele haber problemas, pero para salir suelen ser muy minuciosos sobre todo la policía española con el DNI). Lo suyo es aparcar en La Linea, cerca de la aduana y entrar y salir andando por la misma.

2º) No olvides consultar la meteorología si tienes pensado ir. No vayas a ir en caso de lluvia o si dan viento de Levante, aunque den sol en toda Andalucía, como haya levante en el Estrecho (viento del Este), te puedes encontrar el peñón y sobre todo su zona alta o intermedia, completamente cubierta y no verás un carajo, desde el sendero de las Mediterranean Steps, que es la parte más espectacular y bonita, como nos pasó a nosotros. (Mi gozo en un pozo).

3º) Desde Abril de 2018, los muy piratas, cobran 6€ por persona para acceder a las Mediterranean Steps.

4º) Este itinerario no es ni mucho menos el habitual,  de ir de compras a sus establecimientos, aunque si alguien del grupo lo desea siempre tendrá la opción de separarse del grupo al inicio de la jornada y reencontrarse con el resto, ya a media tarde, en la calle principal de tiendas, por donde pasaremos al descender del Peñón.

5º) Debemos tener cuidado con los monos que saben latín y antes de darte cuenta, no sólo son capaces de robarte no sólo la comida, sino el móvil o la cámara, o directamente la mochila entera. Han aprendido a abrir cremalleras , abrir mochilas y meter las patas en los bolsillos superando a los mejores carteristas. Está prohibido darles de comer, o maltratarlos bajo multa de 200€, el lugar suele estar muy vigilado con cámaras o directamente por sus cuidadores, sobre todo en la zona alta , donde tienen su comederos y bebederos, con varios estanques. No obstante andaremos por zonas menos concurridas , en donde por curiosidad también se acercarán a nosotros en busca de cualquier chuchería, aunque le encantan los plátano , los cuales pelan con suma maestría.

BREVES PINCELADAS: El peñón de Gibraltar, a veces llamado Columna de Hércules, es un macizo rocoso unido a la península ibérica por un istmo de arena, cortado a su vez por un canal. Consiste en un promontorio monolítico de piedra caliza ubicado muy cerca del extremo sur de la península ibérica, si bien el honor de ser el punto más al sur de la Península Ibérica, le corresponde a la "isla" (o más bien itsmo) de Tarifa. Su punto más elevado alcanza los 426 m sobre el nivel del mar. El peñón está situado en el territorio británico de ultramar de Gibraltar y limita al norte con Andalucía. La mayor parte de la zona superior del Peñón es abarcada por una reserva natural donde viven unos 250 macacos de Gibraltar que son los únicos primates que existen en estado salvaje en Europa. Los acantilados a lo largo del borde este del Peñón caen hacia una serie de pendientes de arena azotadas por el viento que se remontan a las glaciaciones, cuando el nivel del mar era menor que el nivel actual y una planicie de arena se extendía hacia el este desde la base del Peñón. Comparativamente su cara oeste, la que mira hacia la bahía de Algeciras, es menos empinada.

RESUMEN DEL ITINERARIO: Aduana-cruzamos la pista del aeropuerto-

Playa de los Catalanes - Playa del Algarrobo - Punta de Europa - Faro de Punta Europa - Columnas de Hércules - Parte alta del Peñón (Zona de reserva / Zona de los monos- macacos de berberia) - Puente colgante Windsor - Calle principal Bishop Rapallo´s- cruzamos la pista del aeropuerto- Aduana.

Se trata de ascender al Peñón por sus cara Sur , después de haber pasado por algunas de sus playas más desconocidas para la mayoría de sus visitantes. La ascensión por las Mediterranean Steps, es un sendero excavado en roca, que nos recuerda al de la Garganta Verde en Zahara de la Sierra, pero en este caso los escalones no son tan altos y además nos da una tregua de vez en cuando con algún descansadero. Las Mediterránean Steps finalizan a escasos metros de su punto más alto, a escasa distancia de la batería O´Maha, cuyos túneles e interior, son dignos de visitar. El descenso se hace por su cara Oeste, a través de los largos tramos de escalera (muy rectilinea) del denominado Charles Wall, cerca del final, merece la pena desviarse unos 200 m tomando a izquierda la angosta carretera por la que llevan las furgonetas turísticas a los guiris a la parte alta, para acercarnos hasta el Puente Colgante de Windsor,  que a pesar de encontrarse a media altura del peñón, nos proporciona unas panorámicas del casco urbano de Gibraltar, su puerto y toda la bahía de Algeciras, realmente espectacular.

DESCRIPCIÓN MAS DETALLADA DEL RECORRIDO Y ALGUNAS PINCELADAS HISTÓRICAS:

Una vez que dejamos nuestro vehículo, ya sea en la Línea, ya sea cruzada la aduana, lo primero que nos encontramos es la destartalada Winston Churchill Avenue,  que atraviesa las pistas del aeropuerto por donde pasaremos ¡andando, tal como suena!, una de las primeras peculiaridades que nos encontramos en Gibraltar. Cuando un avión va a despegar o aterrizar el trafico tanto de personas como de automóviles se paraliza. En ese momento es cuando los visitantes a Gibraltar desenfundan sus cámaras y teléfonos móviles para grabar vídeos. Los que viven o trabajan allí maldicen su mala suerte por encontrarse con el paso cortado. Aunque este no fue nuestro caso, ni a la entrada, ni a la salida.

Mientras íbamos atravesando el aeropuerto de Gibraltar por la Winston Churchill Avenue describiendo una larga serpiente de color en movimiento, contemplábamos con incertidumbre las nubes que cubrían parte alta del peñón, cruzando los dedos, para que se disiparan en el transcurso de la mañana. Contrasta el tono blanquecino de sus magníficos tajos que dan al Mediterráneao (cara Este), con el verde oscuro de la vegetación de su ladera Oeste mas alomada y boscosa, que mira hacia la Bahía de Algeciras, a cuyos pies se encuentra el 95% de su núcleo urbano y Puerto Principal, a media ladera destaca una gran torreón cuadrangular, se trata del antiguo Castillo Morisco es otro de los puntos turísticos más relevantes del Peñón, en su día fue una fortificación medieval con claro dominio estratégico, que iluminan cada noche. Lo más curioso de este castillo es que hasta el año 2010 fue la prisión penitenciaria del Peñón.  

Es antiguo castillo árabe se construyó a principios del Siglo XIV, por Abu-Hassan. Actualmente sólo se conserva la antigua fortaleza, que llegaba hasta Casemates Square, convirtiéndose así en uno de los pocos vestigios, junto los baños árabes del Museo de Gibraltar, de los siete siglos de dominación musulmana. Se puede visitar tomando la línea 1 del servicio de autobuses públicos. La carretera es bastante estrecha y  pero ofrece una perspectiva privilegiada, si te montas en este autobús para subir al Castillo, cógete un asiento del lado izquierdo en la subida y lleva la cámara encendida..

Otra de las primeras cosas que nos llama la atención al llegar a Gibraltar es que allí también se conduce por la derecha, de hecho, junto con Canadá o Belice, es uno de los pocos territorios de la Commonwealth en el que se conduce por la derecha. Este factor se debe a su frontera terrestre con España.

Al llegar a la primera rotonda, nos desviamos a la izquierda, dejando una gran cruz de piedra a la izquierda en memoria de todos los británicos fallecidos en la Primera y Segunda Guerra Mundial, y a la derecha dejamos una gasolinera Petroil (con el techo de chapa amarilla). De tal manera que ahora cambiamos rumbo S, por rumbo E, S-E por la Devil´s Tower Road, después de pasar junto a unos desvencijados edificios muy destartalados, pronto comenzamos a tener a nuestra derecha. los imponentes tajos del Peñón que a partir de ahora, llevaremos a nuestra derecha. A poco que nos fijemos, nos llamará la atención la cantidad de bocas de túneles que vemos a distintas alturas de sus paredes.

Por mas que cueste creerlo hay contabilizados 52 kms de túneles en el Peñón y el subsuelo de su casco urbano, por lo que podemos afirmar que el Peñón es como un gigantesco "queso de gruyer". Muchos aún continúan cerrados porque están gestionados militarmente o albergan carburante.Todo se debe a la pretensión de España de recuperar Gibraltar, tras serle arrebatada por Gran Bretaña en agosto de 1704 en el contexto de la Guerra de Sucesión (1701-1713). Así, el primer intento fallido de rescatar Gibraltar se produjo meses después, en diciembre de ese mismo año. Primer intento, pero no el último. Después de que se firmara el Tratado de Utrecht en 1713 (en el que Gran Bretaña reconoce a Felipe V como rey de España a cambio de la cesión de Menorca y Gibraltar) nuestro país volvió a pretender recuperar Gibraltar. Esta segunda ocasión fue más larga y dura (entre 1779 y 1783), tal es así que fue conocida como El Gran Asedio.

Y fue en esta ocasión, cuando el gobernador de Gibraltar, el general Elliott, mando construir al sargento mayor Ince, a quien se le ocurrió la idea, un túnel para llegar a la cara norte del peñón, donde se encuentra una plataforma que permitía disparar con cañones al ejército español. Tras tres años de excavar en la piedra caliza del peñón utilizando cargas de pólvora, martillos, cinceles y palas, los túneles estuvieron listos. Y España fue de nuevo derrotada.

En 1830 Gibraltar recibió el estatus de colonia británica, y las pretensiones de nuestro país por recuperarlo fueron disminuyendo. Hasta que el Peñón se volvió a sentir amenazado en el siglo XX, pero esta vez no por sus vecinos, los españoles, sino por un enemigo más lejano e inesperado: Hitler.
Así, durante la Segunda Guerra Mundial se aprovecharon estos túneles, se rehabilitaron y ampliaron. La entrada de Gran Bretaña en esta guerra supuso que Gibraltar se convirtiera en un punto clave para los aliados como escala y punto de aprovisionamiento. De este modo, entre 1940 y el final de la guerra, la red de túneles llegó hasta los 52 kilómetros de carreteras (más que en el exterior), diseñados en zig zag con el objetivo de disminuir el efecto de las ondas expansivas en caso de que se lanzasen bombas.

 Actualmente estos túneles se encuentran en situación de desuso (salvo algunas zonas convertidas en museo), pero numerosas fotografías de la Segunda Guerra Mundial nos muestran un laberinto subterráneo donde se podían encontrar almacenes de armamento, un hospital con quirófanos de campaña, cocinas, comedores e incluso una central eléctrica para asegurar el abastecimiento energético a Gibraltar, en caso de un bombardeo.

La prolongación de Devil´s Tower Roar por la que vamos caminando, conforme nos vamos accediendo a la cara Este del Peñón, caminando ya, bajo la base de sus imponentes tajos, pasa a denominarse Sir Herben Miles Road, por la que llegamos a una cala muy coqueta con unas vistosas casas de colores, que le dan un toque muy peculiar a este rincón muy poco visitado del Peñón, se trata de La Playa de Los Catalanes (Catalan Bay) , también conocida como La Caleta , es el primer punto edificado que nos vamos a encontrar entre la carretera y la costa que siempre llevaremos a nuestra izquierda.

¿De dónde viene la denominación de Catalan Bay?, pues resulta que corría el año 1704, cuando se produjo el desembarco de 350 catalanes para luchar codo a codo con tropas anglo-holandesas en contra del interés borbónico en un momento clave en que las tropas españolas estaban a punto de doblegar a las británicas. Entre los llanitos esta playa es conocida como La Caleta.
Tras dejar atrás esta playa pasamos junto al Hotel Caleta , antes de llegar a la segunda playa que existe en la costa Este de la Roca , la Playa del Algarrobo (Sandy Bay). En el centro de la misma hay una urbanización con una cala aparentemente privada.

Pasada la segunda playa llegamos a un túnel de 700 mts. de longitud, donde iremos ascendiendo unos 50 m de desnivel, conocido como Dudley Ward Way, en teoría el tránsito peatonal está prohibido, pero debido a su escaso tráfico rodado y a que es una zona muy poco visitada, prácticamente, no hay vigilancia, tan sólo es recorrido a pie por algún que otro llanito haciendo footing. Aunque no hay acera, la mayor parte del tiempo existe un arcén terrizo que nos da seguridad para pegarnos a aproximarnos a la pared cada vez que venga un coche de frente, caminamos en todo momento por el margen izquierdo. A la salida del túnel realizamos una parada de reagrupamiento y mientras llegaban los últimos compañeros nos estuvimos recreando con los primeros monos que visualizábamos, justo por encima de la salida del túnel, bien tranquilamente reposando, bien jugueteando con los numerosos cables allí instalados.

Aunque al salir del túnel estamos 50 m mas alto respecto al nivel del mar que en el momento que entramos, iniciamos un descenso por la Europa Advance Road, y poco después a la izquierda , hay un pequeño edificio nuevo y lo que parece un mirador. Se trata de la estructura por la que se accede a Gorham´s Cave (la Cueva de Gorham). Muchos gibraltareños, los últimos estudios aseguran que los neandertales que la habitaban dejaron de existir hace unos 40.000 años. El complejo de cuevas prehistóricas y los acantilados que las rodean fueron declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 2016.

Poco después de dejar a la derecha el Crematorio de Gibraltar ya comenzamos a ver un faro rojiblanco que nos marca la ubicación del denominado Europa Point, pero antes pasaremos junto a la gran mezquita del Rey Fahd , así conocida por que se construyó con una donación del Monarca Saudí , inaugurada en el año 1997. También se encuentra el Santuario de Nuestra Señora de Europa, Patrona Católica de Gibraltar. El caso es que entre los habitantes de Gibraltar, como ocurre en muchos barrios obreros de las grandes ciudades del Reino Unido, existe una gran variedad de razas y religiones, desde la católica, a la anglicana, la musulmana, la judía o  hasta el hinduismo. Esta variedad religiosa nos muestra una vez más el estratégico enclave que siempre ha representado.

Si el rey saudí Fahd bin Abdulaziz al-Saud hubiera tenido el generoso gesto de edificar una mezquita en el que consideró punto más meridional de Europa unos años atrás, hubiera coincidido con un curioso desfile: el de cientos de coches viejos que molestaban sobremanera a los vecinos de Gibraltar. Pero no lo hizo, esperó a su momento, y hoy el templo se levanta bajo el Peñón y ante una gran explanada surcada por más vientos que fieles y por más curiosos que vecinos. Los aparcamientos, vacíos y sacudidos por el sempiterno levante, no dejan adivinar la tragedia automovilística que tuvo lugar frente a la piadosa mezquita unos años atrás.  Tal y como nos relata en su libro el maestro del periodismo español, Manuel Leguineche, en su libro "Gibraltar"; En 1981, ‘llegó a tal extremo el atasco de coches, que las autoridades se vieron obligadas a despeñar más de mil vehículos por los acantilados de Punta Europa’. 

Europe Point, como le dicen los llanitos, es el punto más meridional de la Roca, una zona azotada por los vientos pero que, como contraprestación tal vez, tiene unas espectaculares vistas en los días claros: el estrecho, las montañas del Rift y la bahía de Algeciras. Hoy los coches fluyen con facilidad por la colonia, colapsados tan sólo por los controles policiales de la aduana española o por los despegues y aterrizajes de los aviones en el aeropuerto del Peñón, un aeropuerto que España reclama como propio y cuyo terreno fue ganado por los llanitos a hurtadillas, adelantando posiciones cuando nadie miraba. Como ocurre hoy día en la cara oriental de la Roca con el llamado ‘Proyecto Foster’, que prevé, según quien lo cuente, construir más atraques para aumentar el negocio del "bunkering" o bien edificar apartamentos y hoteles para ganar una gran zona recreativa al mar (con el consiguiente berrinche del gobierno español, que considera suyas las aguas… y a decir verdad, también las tierras porque decenas de camiones trasladan escombros desde España casi que a diario para las labores del relleno). Los pescadores de La Línea, usuarios, o usufructuarios (según quien lo diga también) hablan del Pequeño Mónaco, como lo denominan, para explicar los motivos por los que las autoridades del Peñón no quieren que faenen en la zona. El proyecto, ya sin Fosters ni Mónacos, tiene un nombre más poético: Sovereign Bay, un nombre que es, al tiempo, una declaración de principios

Desde la aduana hasta el faro de Punta de Europa de 20 m de altura, (Europa Point), que fue el segundo en entrar en servicio en el Estrecho, en 1841 , después del de Tarifa, ya hemos recorrido 6,5 km de perfil prácticamente llano. Punta Europa que es como se le conoce a esta agradable zona de paseo y esparcimiento, frente a la cual podemos observar cómo se fusionan las corrientes del Atlántico y del Mediterráneo, que con frecuencia llevan direcciones contrarias. Ni que decir tiene que estamos en el extremo sur de Gibraltar y casi de la Península Ibérica, si bien su extremo sur es el itsmo de Tarifa, conocido como "La Isla".  El Faro de Punta Europa es el último punto de Gibraltar en el que podemos encontrar un faro activo, que además es el único Trinity House fuera de Reino Unido. Entre los llanitos, el faro es conocido como la farola. Es un magnífico lugar para el avistamiento de aves migratorias. En los días más despejados podemos ver Ceuta y, bastante en la lejanía Tánger, pues sólo separan unos 15 kilómetros el continente europeo del africano.

Gibraltar está lleno de cañones, antiguas baterías y monumentos dedicados a antiguos héroes y placas de efemérides, cerca del faro nos encontramos con un monumento dedicado al General Wladyslaw Sikorski, (jefe del ejército polaco y presidente en el exilio durante la Segunda Guerra Mundial), y a los demás militares polacos que murieron al estrellarse su avión , el 4 de julio de 1943 después de haber despegado del aeródromo de Gibraltar. También hay una gran pieza de artillería que más de un compañero aprovecho para fotografiarse simulando su manejo.

Abandonamos Punta de Europa, volviendo a pasar junto a la Mezquita, para iniciar el tramo de ascensión. Vamos ganando altura por encima de la Ensenada de Europa, en la parte alta de un acantilado a nuestra izquierda, nos llama la atención una salida de agua que forma una espectacular cascada, que finaliza muy cerca del mar, junto a lo que parecen las instalaciones de una piscina municipal. Desconozco la procedencia de esas aguas (nada bueno, seguro). ¡Por cierto!, que hay que reconocer que con la ayuda del Imperio británico, esta gente se lo tiene montado muy bien. Resulta que en los sectores de la electricidad y abastecimiento de agua, Gibraltar es completamente autónoma. Posee una central eléctrica, aunque algo limitada, pues en los días de más frío, lluvia o calor, se suceden los apagones. Actualmente el suministro de agua es mantenido por AquaGib, una filial de la compañía británica de agua Northumbrian Water y se obtiene por ósmosis. https://en.wikipedia.org/wiki/Water_supply_and_sanitation_in_Gibraltar
De hecho han implantado un sistema en el que las casas tienen dos sistemas de tubería, por una lado el agua que es para consumo humano se obtiene por proceso osmótico y la que es destinada para el cuarto de baño es directamente agua de mar. https://www.nwl.co.uk/media-centre/611_4832.aspx

Respecto al tema de las telecomunicaciones son también autónomos.
Disponen de varias compañías en el ámbito nacional como son Gibtelecom, Sapphire Networks, U-mee o GibFibreSpeed. Es lógico que para la transmisión internacional disponga de servicios de empresas españolas porque cruzan su territorio y es su país vecino. Con España ocurre lo mismo cuando realiza transmisiones internacionales. Siguiendo las indicaciones de "Upper Rock", llegamos al inicio de la angosta carretera por la que veremos pasar un desfile de pequeñas furgonetas que llevan a los turistas hasta la parte alta del Peñón y poco después llegamos a una caseta de madera y una barrera de control, justo al inicio del sendero de las Mediterranean Steps, donde nos llevamos la desagradable sorpresa de que si queríamos hacer uso del sendero, teníamos que pagar 6€ por persona, sin posibilidad de descuento de precio de grupo y ni siquiera de pedir una "inexistente" hoja de reclamaciones. ¡Que digo yo, que por 6€, ya pod´rían incluir los muy HIJOS DE PUTA, la visita a la relativamente cercana "Saint Michael Cave"!.

Argumentando que nadie nos obligaba a pagar. A pesar de que a todos nos parecía abusivo y más de uno nos encaramos con la tal "Lourdes Galliano" la mujer de la taquilla, argumentándole que solo por hacer uso de las Mediterranean Steps, sin incluir nada mas, como por ejemplo la Cueva de San Miguel, Los Túneles del Asedio o el Castillo Árabe, nos parecía un auténtico atraco a mano armada y que en el fondo ella lo sabía, por mucha cara de póker que pusiera, recordándole que este hecho era un clarísimo ejemplo de la mala fama de piratas y oportunistas que tienen "los llanitos". Mientras el hombre que estaba fuera, supuestamente controlando la barrera de acceso y la entrada al sendero, ya no sabía dónde meterse con la bronca que le estaba echando nuestra compañera Ana de "Torrox", con dos o tres como ellas habría bastado para recuperar el Peñón cuando estuvimos tan cerca de conseguirlo. No sin un aluvión de quejas bien argumentadas ( y sin faltar el respeto), fuimos pasando religiosamente por taquilla. A excepción de Pepe y Rosa que ya lo habían visitado antes y de Diego y demás ex compañeros del Corte Inglés, que prefirieron renunciar a las Mediterranean Steps y bajar ya directamente hacia la zona Comercial, para encontrarse más tarde con nosotros, antes que subvencionar el Brexit con la puñalada trapera de los 6€ por persona (sólo por caminar, sin un guía local y unos cuantos carteles descoloridos por el sol y las inclemencias meteorológicas).

¡Pero ya que estábamos allí!, el resto del grupo nos adentramos por el mítico sendero de las Mediterranean Steps, que en apenas 1,5 km, nos lleva hasta la parte más alta del peñón, al principio, alternando pequeños tramos escalonados y tramos más o menos llanitos o de suave pendiente, envuelto en galerías de un pequeño sotobosque formado por jazmínes, madreselvas, madreselva, íberis gibraltárica, grandes palmitos, lentiscos y acebuches principalmente. 
Al principio tenemos vistas hacia la Bahía de Algeciras, pero apenas unos minutos, pasamos a tener vistas hacia el Mediterráneo, siempre y cuando no sea un día de levante, como en nuestro caso, que apenas pudimos disfrutar de la impresionante panorámica aérea que desde allí arriba se disfruta sobre el Mar.

Cuando llegamos al primer tramo escalonado, curiosamente no son en ascenso, sino que descendemos algunos metros de desnivel antes de comenzar a subir "a jierro".

Después de un primer tramo de ascensión a la altura de un descansadero donde hicimos una breve parada de reagrupamiento, aprovechamos para visitar unas covachas cercanas, a partir de las cuales empezamos a encontrarnos con los monos.

El siguiente hito es un pequeño túnel excavado en la roca y más adelante nos desviamos a la derecha, hasta llegar a un mirador con vistas grandiosas en los días despejados. Partiendo del mirador afrontamos el último tramo de subida , que se hace bastante penoso, para una persona que no esté lo suficientemente en forma este tramo puede resultarle una pesadilla. Lo más parecido que recuerdo es el tramo escalonado de La Garganta Verde, cerca de Zahara de la Sierra.

Al llegar a la divisoria de aguas, dejamos atrás las vistas hacia el Mediterráneo (Este), aunque nosotros sólo veíamos nubes y comenzando a disfrutar de vistas sobre la bahía de Algeciras y el Parque de Los Alcornocales al fondo. Tan pronto como accedemos a la angosta carreterilla que discurre por la parte superior del Peñón, la tomamoamos a la izquierda, y en apenas 50 m llegamos al punto más alto del Peñón (426 msnm), donde se encuentra la Bateria O´Hara (O´Hara´s Battery), la valla suele estar abierta durante el día abierta, por lo que se puede acceder y disfrutar de las mejores vistas de la parte Sur de Gibraltar (si las nubes no te lo impiden).

Esta batería fue construido en 1890 en el antiguo emplazamiento de una torre de vigilancia, construida por el Gobernador Charles O’Hara, conocido como “la locura de O’Hara”. La batería y la torre fueron nombrados con su nombre, el Gobernador de Gibraltar Charles O'Hara. La primera batería montada era un arma de retrocarga de 6 pulgadas, que fue sustituido con un 9,2 pulgadas Mark X BL en 1901. La batería estaba en uso durante la Segunda Guerra Mundial y la última vez durante ejercicios de entrenamiento en 1976. Batería de O’Hara ha sido reformado y está abierto al público y que algunos compañeros visitamos, mientras el resto del grupo intentaba almorzar como mejor podía y sin bajar la guardia, con un ojo en el bocata y con otro en el mono más cercano, que lo mismo te robaba la comida, que la mochila, el móvil, la cámara, el DNI o lo primero que pillara, el caso era llevarse algo, algo lo que más les gusta es la comida, ¡pero ojo, no olvidéis que actualmente se multa con 200€ si se le echa comida!. (Otra cosa es que te la robe). Pero no hay que olvidar que estos "Macacos de Berbería" (Macaca sylvanus), tiene un equipo de cuidadores a su disposición, no solo para su alimentación y que no les falte su agua limpia, sino para el control de enfermedades, censo de población, etc...

Esta reserva natural del Peñón donde los monos de berbería viven libres es la única existente en toda Europa. En verano, cuando el calor aprieta por estas tierras sureñas, es habitual verlos por la ciudad cerca de alguna fuente o intentando robar botellas de las tiendas. Las malas lenguas dicen que les dejan rastros de comida para que bajen a la ciudad porque es cuando más turistas la visitan. Aunque hay bastante carteles avisándote de que no los alimentes.

Finalizado el almuerzo entre risas y gritos espantando a los monos, retomamos la caminata por la angosta carretera que a lo largo de aproximadamente 1 km discurre muy cerca de la crestería que casi todo el tiempo llevaremos muy cerca, a la derecha, a la que merecerá la pena asomarse de vez en cuando para disfrutar de las vistas sobre el Mediterráneo, porque de lo que siempre tenemos vista a partir de ahora, es de la Bahía de Algeciras a nuestra izquierda, con el puerto y núcleo urbano de Gibraltar a nuestros pies. A lo largo de esta angosta carretera pasaremos junto a un buen número de monos desde crías, hasta individuos adultos, algunos muy viejos, otros jóvenes, con frecuencia recostados por parejas, desparasitándose con gran parsimonia, otros durmiendo, a aproximarte abren un ojo y si vas caminando despacio o sin hacer ruido, ni se inmutan, otras veces salen corriendo y saltan hasta la rama o barandilla más cercana, otras veces se suben al techo de las furgonetas para deleite de los turistas y los choferes, expertos, hasta los cogen, los acarician o bromean con ellos.

La mayor concentración de monos se encuentran en la parte alta de las escalerillas del denominado Charles V Wall, que debe su nombre al Rey español, Carlos V, que mandó a construir este muro bastante rectilíneo que sube por la ladera occidental, desde el primer tercio de ladera hasta la parte alta del Peñón, siendo el acceso más utilizado por los turistas para subir a pie, desde el casco urbano. Tras la ocupación musulmana, Castilla recobró el control de Gibraltar en el octavo sitio de 1462. La amenaza morisca retrocedió después de la finalización de la Reconquista, y las fortificaciones se fueron abandonando, con muy pocos cañones montados en las baterías. En 1535, el comandante naval español Don Álvaro de Bazán el Viejo, advirtió el rey Carlos I, que las defensas de Gibraltar eran muy insuficientes. Sin embargo, su consejo fue ignorado. El equipo de la guarnición era anticuado y su número era escaso. Las murallas de la ciudad eran todavía esencialmente medievales y no podían resistirse a la artillería de mediados del siglo XVI. Los habitantes de la ciudad pagaron el precio por este descuido en septiembre de 1540 cuando los piratas de Barbary del norte de África realizaron una incursión importante, aprovechando las defensas débiles. Cientos de residentes de Gibraltar fueron tomados como rehenes o esclavos. A raíz de aquel asalto la corona española respondió a la vulnerabilidad de Gibraltar construyendo la Muralla de Carlos V para controlar el flanco sur y oeste de la Roca.

Ni que decir tiene que el descenso más bonito y visual se realiza a través de las angostas escaleras adosadas a la muralla, de manera que la parte alta de las murallas la llevaremos a nuestra izquierda, sin impedirnos las vistas por encima de la misma y a la derecha un pasamanos, bien en forma de barandilla, bien con grandes maromas, bastante sucias y grasientas por el número de visitantes que las transita cada día, con la incomodidad de tener que detenerte o ponerte de lado, cada vez que te encuentras con alguien en sentido contrario. La angosta carretera que en zig-zags, comunica el casco urbano con la parte alta del Peñón se cruza hasta en cuatro ocasiones  "Charles V Wall Steps" ("Escaleras del muro de Carlos V) por dónde venimos descendiendo. Estas encrucijadas que nos encontramos cada 60-80 m lineales, se han reconvertido en algunos casos en miradores con pequeñas áreas de recreo y sobre todo descansaderos, para quienes suben o bajan por ella.

No recuerdo bien, si es al llegar a la última o a la penúltima encrucijada con la carreterilla, merece la pena tomarla unos 200 m a la izquierda, para recorrer un ramal de ida y vuelta, que nos llevará hasta el Puente Colgante Windsor (Windsor Brigde) , fabricado e instalado por la empresa española iMuntanya , inaugurado en el año 2016, que realmente espectacular, el puente mide unos 50 m de longitud y las sensaciones aéreas son extraordinarias, hacia la zona de la bahía de Algeciras, a pesar de que se encuentre, a media altura del Peñón. Una vez al otro lado del puente, tenemos la opción de volverlo a cruzar en sentido contrario, o bien, tomar el sendero, que a modo de pasarela, discurre a media altura, colgado de la misma pared del desfiladero, que forma una especie de cuña, en este recóndito rincón del Peñón, del que apenas habíamos oído hablar hasta ahora.

Una vez que nos hemos recreado con este mágico rincón del puente colgante "Windsor Brigde" regresamos sobre nuestros pasos y ya sólo tenemos que limitarnos a continuar descendiendo por la carretera estrechita, que nos lleva hasta la batería Devil´s Gap Battery. Regresamos sobre nuestros pasos al camino de descenso y después de una curva muy pronunciada a la izquierda , antes de una cancela cerrada, hay un desvío peatonal a la derecha, que tomaremos, siendo esta la entrada, en nuestro caso salida que conecta la Reserva Natural (Upper Rock Nature Reserve), que dejamos a nuestra espalda y el casco urbano al que entramos por empinadas calles, donde no tardamos en encontrarnos sus curiosas cabinas rojas, todo un símbolo british para nostálgicos, mas como puro fetichismo para reafirmarse en el orgullo (o más bien CONEVENIENCIA) de sentirse británicos, que por motivos prácticos, en esta época de la telefonía móvil y las redes sociales. Y por la Prince Edward´s Road, aunque en realidad es calle, siempre en sentido descendente, venimos a desembocar en la popular calle comercial, Bishop Rapallo´s Ramp, calle Principal (Main Street) y que es la más visitada y concurrida por los turistas en cualquier época del año, que tomaremos a nuestra derecha. 

Al menos hasta que se implante el Brexit, del que no quiene ni oir hablar en Gibraltar,, siempre ha sido un buen lugar para ir de compras, especialmente para las bebidas alcohólicas, el tabaco, la mágica pomada tipo DEEP HEAT (una especie de reflex milagroso) y todo tipo de productos y aparatos electrónicos, ya que en Gibraltar no existe el IVA,  el alcohol y el tabaco tienen un impuesto de exportación e importación que va a parar al gobierno de Gibraltar, lo que ocurre es que aun así los precios son inferiores que en España.  Curiosamente estos productos se compran directamente a España, sin embargo la diferencia brutal de precios radica en la clavada tan grande que nos meten en España por los impuestos. En este caso nuestros corruptos Gobernantes son los auténticos piratas, o al menos, bastante más que los comerciantes y políticos gibraltareños. La gasolina tiene un tanto por ciento incrementado, puesto que de su consumo, pagan lo que equivale a nuestro impuesto de circulación.Todas las compañías que tienen su sede en el Peñón también pagan impuestos. En teoría, hoy por hoy no existe la denominación offshore, que significa, de baja fiscalidad o de paraíso fiscal, sin embargo, del dicho al hecho hay mucho trecho, hasta el punto de que en Gibraltar hay mas empresas registradas que habitantes, ¡por algo será!.

Ni que decir tiene, que podemos pagar tanto con euros, como con libras. Otra peculiaridad es que al no formar parte del Tratado de Schengen ni de la zona Euro, Gibraltar es también autónoma en su moneda. El gobierno local, emite sus propias libras gibraltareñas. Actualmente el cambio de divisa está igualado con la libra esterlina, aunque ha habido épocas en la que se situaba por debajo. GIB (Gibraltar pounds) es su denominación en el mercado.

 Tal y como os iba diciendo, al llegar a la Bishop Rapallo´s Ramp, calle Principal, la tomamos a la derecha, y además de pasar por delante de muchas tiendas, bares y restaurantes, pasaremos por delante de varias iglesias, la "Catedral" de Santa Maria Coronada, donde John Lennon y Yoko Ono se dieron el “sí, quiero” el 20 de Marzo de 1969.

Al final de esta calle tan comercial, giraremos ligeramente a la derecha, para dirigirnos hacia la Winston Churchill Avenue (la famosa avenida que cruza el aeropuerto), pasando por mas zonas de bares, restaurantes, tiendas y algún fragmento de muralla, batería o estatua homenaje tan frecuentes en Gibraltar. Algo que siempre me ha maravillado de los británicos (al igual que alemanes, americanos, franceses, australianos, japoneses, escandinavos, etc...) es su sentido patrio y el sentirse orgullosos de su País, de sus héroes, de su historia, a pesar de sus luces y sus sombras, con no pocos genocidios en algunos momentos de la historia. Sin embargo, el orgullo patrio a su país, su bandera, su himno, sus héroes nacionales, siempre ha sido algo sagrado y para las cosas importantes, sus políticos, casi siempre se han puesto de acuerdo, remando todos en la misma dirección. Al contrario, que por desgracia, ocurre en España, precisamente fruto de esa falta de unión y dejar la casa sin barrer en momentos claves de nuestra historia, Gibraltar es Británica desde hace mas de 300 años.

Otra cosa es que muchos de sus habitantes tengan apellido español o hablen con un acento mas andaluz que "Toni Rodríguez" o "El Chano de Cádiz" , eso sí con una auténtica rebujina de "Spanglish" tipo: "Chachi, whatever you want pisha" también incorpora palabras del italiano, maltés y portugués. Curiosamente el llanito o yanito es un término de origen desconocido. Se utiliza constantemente para referirnos a los habitantes de Gibraltar y a su peculiar uso del lenguaje. El origen de la palabra chachi viene por una deformación de Churchill. Y es que después de la Guerra Civil y la Segunda Guerra Mundial la escasez en España era todo un hecho. Gibraltar gozaba de más abundancia y floreció el mercado negro. Hay que tener en cuenta que por aquellos días la frontera entre ambos territorios estaba cerrada. Todos los artículos buenos venían del lado de Churchill, por aquel entonces Primer Ministro. Así que como buenos andaluces empezamos a acortar la palabra y a deformarla llegando a crear chachi, para algo que está bien o es de calidad.

El inicio de la Avenida Windston Churchill, una vez que enfilamos hacia el aeropuerto, coincide con el Victoria Stadium, que dejamos a nuestra izquierda, donde por cierto, al pasar, se estaba jugando un partido de la Premier League Gibraltareña que consta de diez equipos, ¡cuñaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaao lo has pillao!.

Y es que aunque suene a cachondeo En el 2013, Gibraltar fue admitida, después de muchos años solicitándolo, como selección de fútbol en la UEFA, pese a la oposición de España, que manifestó que por conflictos políticos no se enfrentaría a ésta. Lo anecdótico de todo esto, es que la UEFA lo admite, siempre y cuando sea en fase de clasificación, negando tal recurso en una fase final.
En el sorteo de selecciones para clasificarse para la fase final de la Eurocopa de Francia 2016, el sorteo deparó a ambas selecciones encuadradas en el mismo grupo para luchar por la clasificación. Posteriormente, la UEFA modificó manualmente los grupos para que la selección del Peñón estuviera en otro diferente.
El campo de fútbol donde entrenan es el Victoria Stadium. Cabe destacar, que para los partidos de la selección tienen que desplazarse a jugar a Portugal, ya que el Victoria Stadium no cumple con los requisitos mínimos exigidos por la UEFA. Actualmente se encuentra en fase de proyecto la construcción de un nuevo estadio que cumpla los requisitos pertinentes.

Volvimos a atravesar las pistas del aeropuerto por la Avenida Winston Churchill, ya bajo un cielo azul y con un Peñón mucho más despejado (a buenas horas), y salimos por ambas aduanas sin problemas, desde donde nos dirigimos a la zona donde el autobús vendría a recogernos pocos minutos muy pies, al comienzo de una avenida, relativamente cercana al estadio del histórico equipo andaluz "la Balompédica Linense" del que nuestro socio Juan Luis España Martín "Juanlukita", es uno de sus accionistas principales en la actualidad.

Otras peculiaridades de Gibraltar:

Coloquialmente entre los anglosajones Gibraltar se conoce como "Gib o The Rock".

Cada diez de Septiembre Gibraltar se viste de rojo y blanco. Y cuando digo se viste es literal porque todos sus habitantes combinan ambos colores, como si fueran los Sanfermines, para celebrar el día nacional. Todos los balcones y la plaza donde se celebran la mayoría de los actos, Grand Casemates Square, se adornan con banderas. Ese día se lanzan al aire 30.000 globos rojos y blancos aproximadamente (uno por habitante) simbolizando la autodeterminación del pueblo gibralteraño alcanzada en 1967. Pero desde 2016 se lanzan papeles blancos y rojos en vez de globos en respuesta a los grupos medioambientales de la zona, que denunciaban los daños que los globos podían causar en el medio marino. No sé si será de cara a la galería, pero en las zonas de playa por las que pasamos si había numerosos carteles recordando no arrojar basuras al mar, con las tristes fotos de aves con el estómago abierto repleto de tapones, tortugas enredadas en bolsas y plásticos, etc...

Gibraltar también se encuentra a la vanguardia en telecomunaciones. Ofrece servicios de centro de datos y almacenamiento, así como circuitos de carácter internacional para proveer a casas de apuestas y bancos entre otros clientes potenciales.
El usuario final tiene a su disposición fibra óptica, con hasta 300 Mbps de velocidad, incluyendo televisión y telefonía fija y móvil. La compañía que lo proporciona es U-mee, desempeñando sus servicios a través de la infraestructura de Sapphire Networks.

En el 2006 se prohibieron las apuestas online en Estados Unidos, situación que aprovechó Gibraltar de una manera excepcional, convirtiéndose en la capital mundial de las casas de apuestas. Atraídas por la baja o exenta fiscalidad en aquellas fechas, no dudaron en convertir a La Roca en su centro de operaciones. Actualmente y con una carga impositiva mayor, un 10%, representa uno de los pilares básicos de la economía gibraltareña y del Campo de Gibraltar puesto que unos 5.000 españoles trabajan directa o indirectamente gracias a este negocio en auge.

En una próxima visita no podemos dejar de visitar la St Michael’s Cave, "Cuevas de San Miguel", que están situadas dentro de la Reserva Natural del Peñón, a unos 300 metros de altura sobre el nivel del mar. Su composición es de roca caliza. Fue en esta red de cavernas rocosas donde, según cuenta la leyenda, hubo una aparición del arcángel Miguel, de ahí su nombre.

Si Gibraltar fuese considerado un país y no un territorio de ultramar, en el 2013 hubiese sido el tercero con mayor PIB per cápita.Ocupa el quinto lugar entre los territorios con mayor densidad de población. 4.328 habitantes por kilómetro cuadrado, según datos del 2018. Su población era de 32.436 a mediados de 2018. El 96% de la población votó remain (permanecer) en el proceso conocido como Brexit ("¡Por el interés, te quiero, Andrés!")..

En junio de 2016, los trabajadores contratados según los últimos datos del Servicio de Empleo de Gibraltar fueron 7.153 de un total de 12. 361 trabajadores transfronterizos. Según las estadísticas de turismo, cruzan la frontera terrestre unas 26.400 personas al día, es decir, además de los trabajadores fijos, cruza la frontera a diario una media de 14.000 personas entre turistas, trabajadores eventuales, proveedores, etc.

Gibraltar posee un marcado toque de pueblo genovés en sus construcciones. Esto se debe a que en 1753 el 34% de la ciudad provenía de ese lugar italiano. Si bien, en general, exceptuando sus iglesias, fortaleza y algún enclave puntual, el conjunto general de su casco urbano es tan feo, como caótico y destartalado. Entre sus medios de comunicación podemos encontrar en la prensa escrita y digital, chronicle.gi y GBC (Gibraltar Broadcasting Corporation) como medio de difusión televisiva.

Los edificios de la Ocean Waves de Gibraltar fueron construidos por la empresa holandesa Van Oord. La técnica utilizada fue la misma que en las anteriores. Dragar suelo marino para poder edificar sobre el nivel del mar. También construyeron un rompeolas.

Su festival de música: Gibraltar Music Festival, gana adeptos y más grupos internacionales cada año. Dentro el grupo de personalidades famosas de Gibraltar, quizás la que más sonó en la radiofórmula española fue la banda de pop-rock Melon Diesel. El nombre de la formación corresponde a un chupito de un bar de la zona.

La modelo gibraltareña Kaiane Aldorino López fue conorada "Miss Mundo en el 2009".

Corría el año 1969, cuando nuestro Excelentísimo Ministro Don Manuel Fraga, impuso un recargo obligatorio de media peseta para todos los españoles que enviaran cartas o postales (se pasó de 1 pta a 1,50 pts en cartas locales y de 1,50 Pts a 2 Pts en cartas a la península). Con el fin de allegar fondos en favor de los españoles que dejaron de trabajar en Gibraltar, una medida con muy buenas intenciones. La  cantidad recaudada por este concepto fue de 1.400 millones de pesetas anuales (de la época), pero desgraciadamente, nunca llegaron ni a La Línea, ni a la comarca, ni a los trabajadores y empresarios. ¿Se hubiera permitido algo así en Cataluña o País Vasco?. Por desgracia, 50 años después Andalucía sigue estando pésimamente gestionada por culpa de nuestro nefasto y corrupto gobierno autonómico, en su día con Chaves, después con Griñán y ahora con Susana Diaz. Cualquier mono del Peñón nos gobernaría con más eficacia, honradez y dignidad, que nuestros actuales dirigentes políticos, tanto a nivel autonómico, como nacional.

Según cuentan las malas lenguas, Gibraltar es un nido de piratas y traficantes, donde muchos de sus jóvenes rechazan becas para estudiar en Reino Unido porque ganan hasta 500 € diarios en su actividad delictiva de tráfico de tabaco o hachis con sus lanchas megapotentes que sus guardacostas protegen de la Guardia Civil. Que la mayoría de los llanitos que dicen “yo no zoy ehpañó yo zoy inglé” viven en Estepona, Sabinillas, Manilva, Sotogrande, etc…etc… y les gusta mucho usar nuestro sistema sanitario, nuestras carreteras y nuestra forma de vida pero vuelven cada día a la roca para continuar su actividad de lavado de dinero o contrabandos varios.

¿Cómo perdimos el Peñón de Gibraltar?

Corría el mes de  noviembre de 1700, cuando toda Europa puso la vista en una potencia mundial con un trono vacío, un reino sin monarca. Carlos II de España, el último de la dinastía de los Habsburgo, moría sin descendencia y dejaba huérfano a un Imperio donde el sol nunca se llegaba a esconder. Trás su muerte se nombra sucesor a Felipe de Anjou, nieto del rey francés Luis XIV y bisnieto de Felipe IV , sin embargo pronto aparecen los detractores de la llegada de los Borbones al trono español ya que se teme tanto en España como fuera de sus fronteras  la hegemonía y unión de España-Francia. Inglaterra y Holanda apoyarán al candidato austriaco Carlos de Habsburgo.

Solo hizo falta la llegada de la primavera de 1701 para que los ejércitos de toda Europa pusieran rumbo a la península en busca de un trozo del pastel. Tras doce años de guerra por la sucesión al trono entre Felipe de Anjou o de Borbón, apoyado por el rey francés Luis XIV, y el archiduque Carlos de Austria, apoyado por Gran Bretaña, Portugal, Países Bajos y la mayoría de los estados alemanes, se instaura la paz en la península como consecuencia del desgaste sufrido por las naciones participantes.

El 11 de abril de 1713 se firmó en la ciudad holandesa de Utrecht el primer tratado de paz que dió por finalizada la Guerra de Sucesión Española, este sería un momento importantísimo para las diferentes potencias europeas, que tras largos años de guerras y conflictos se reparten el mapa de Europa siguiendo una serie de acuerdos diplomáticos sin los cuales hoy día se podría entender la historia contemporánea.

En el artículo X del Tratado de Utrech se establecía que España cedía a Gran Bretaña la isla de Menorca y la ciudad de Gibraltar, además de las concesiones de carácter mercantil que suponían el fin del monopolio español con el comercio de las Indias. Dos puertos y puntos estratégicos desde donde se controlaría el centro y la entrada del Mediterráneo. Aunque el Tratado de Utrecht significaba la paz, esta no llegaría hasta 1714, cuando se acabaron las hostilidades en Cataluña, región que apoyaba a Carlos de Austria y por lo tanto a los británicos, a quienes ayudaron en un momento clave del asalto del asedio español al Peñón, que acabó declinando la balanza a favor de los británicos, gracias a los 200 catalanes que desembarcaron en una calita, hoy conocida como:  "Catalan Bay".

El Tratado también establecía ventajas comerciales en el imperio español de las Indias, concretadas en el comercio de esclavos, que fue concedido a la South Sea Company y en virtud del cual podía enviar a la América española un total de 144.000 esclavos durante treinta años, y el 'navío de permiso anual', un barco de 500 toneladas autorizado a transportar mercancías a la feria de Portobello sin pago de aranceles. Con estas dos concesiones se rompía por primera vez el monopolio comercial que había mantenido la Monarquía Hispánica con sus ciudades en Sudamérica durante los dos siglos anteriores. En 1715, Menorca volvería a ser parte del territorio español, pero Gibraltar sigue estando hoy, bajo dominio británico.

Durante la II Guerra Mundial, Franco optó por mantenerse neutral, por no invadir Gibraltar con la 'operación Félix' y dejar que Gran Bretaña usara la zona como punto estratégico determinante para la guerra en el Mediterráneo y en el Norte de África. Tras la guerra, Franco aisló a la pequeña ciudad tras una valla, pero el aeropuerto que se construyó permitió a Gran Bretaña establecer un puente aéreo con la población. Con el tiempo el roce hizo el cariño y, poco a poco, se empezaron a abrir las comunicaciones entre nuestro país y la ciudad a pies del Peñón. Han pasado 300 años de la firma del Tratado y en la actualidad, sigue dando problemas. En el año 1986 se intentó llegar a un acuerdo por el que se compartiese el aeropuerto de la ciudad, pero fue totalmente rechazado. No sería hasta el año 2006 cuando se estableció el uso compartido del aeropuerto tras el acuerdo entre los gobiernos de España, Gran Bretaña y Gibraltar. Pero España denunció en junio de 2012 ante la Comisión Europea (CE) el régimen fiscal de Gibraltar, al considerar que la aplicación de un impuesto de sociedades del 10%, así como que este se aplique solo a ingresos generados o procedentes de la colonia, favorece la deslocalización de empresas. Como consecuencia, en diciembre, los ministros de Economía y Finanzas de la UE respaldaron un informe sobre prácticas fiscales que concluye que parte del régimen de Gibraltar es «dañino».

¿Será alguna vez Gibraltar español?

Gibraltar ha sido siempre una espina clavada en el orgullo de España. «No pisaré Gibraltar mientras no haya una bandera española», dijo en su día el Ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo. «Alguien debería decirle a nuestro ministro que nunca será así. Un trozo de roca con una pequeña ciudad amurallada de 30.000 habitantes que, aunque comparta también nuestra lengua, sus pobladores se sienten más orgullosos de ser británicos que la propia reina madre», asegura el profesor de Derecho Internacional Público de la Facultad de Algeciras Jesús Verdú Baeza. «Pero, por mucho que reclamemos esa ciudad, ciñéndonos a artículos del tratado de Utrecht, nunca podremos recuperar Gibraltar porque las normas modernas del derecho internacional las validan ante un tribunal".