El Caso Slevin

EL caso Slevin:
La película, que como todas las de 2006, ya lleva varios meses en los video clubs, empieza con una escena desconcertante que quedará perfectamente aclarada al final y a renglón seguido nos traslada al tremendo drama que sufre un hombre que apuesta lo que no tiene por fiarse de quien no debe. Y tras esta breve pero impactante introducción comienza el argumento de la película sin ninguna conexión aparente con todo lo que llevamos visto hasta ahora.
A Slevin la vida no le va nada bien. Acaban de declarar ruinosa su casa y ha encontrado a su novia en la cama con otro tío. Para cambiar de aires y empezar de cero, toma prestado el apartamento de su amigo Nick Fisher en Nueva York. Pero la pesadilla no ha hecho mas que empezar. Sin comerlo ni beberlo se ve forzado a trabajar para, los dos mafiosos más respetados y temidos son El Rabino y El Jefe. Anteriormente socios y actualmente enemigos acérrimos, los dos gángsteres viven atrincherados en sus fortalezas, una frente a la otra. A pesar de su poder, los dos están prisioneros de su propia paranoia ya que llevan 20 años sin salir de sus particulares reinos. Pero la tensión entre ellos va en aumento. Para vengar el asesinato de su hijo, El Jefe planea matar al hijo del Rabino. Pero si parece un asesinato premeditado desencadenará la Tercera Guerra Mundial. Para solucionar el problema El Jefe contrata al conocido asesino a sueldo Goodkat, cuyo plan es de lo más sencillo: buscará un jugador que le deba mucho dinero al Jefe y le obligará a matar al hijo del Rabino. Y... ¿A quién elegirá? A “Slevin” al que confunden con “Nick Fisher” peroen esta película nada es lo que parece.

Esta película recomendada por “Antonio Carlos” (“El Maestro ó Pequeño Copola”) me ha gustado muchísimo. Tiene tintes hitchconianos que nos recuerda a “Con la muerte en los talones” y algunas escenas impactantes tipo “Tarantino” ó “Robert Rodríguez”. El argumento te mantiene enganchado durante toda la película, con un guión muy original y cambios de situación repentinos, el ritmo es trepidante, la factura técnica es impecable, moderna fotografía y música cautivadora, con un reparto de lujo y magnífico trabajo de casting, cuidado hasta el mínimo detalle.

Gracias Maestro, fue una recomendación buenísima.