Sábado, 9 de agosto de 2008De La Venta San Juan al Prado de la Escribana (Valle del Genal):
Sin duda alguna, se trata de uno de los tramos mas dóciles y entretenidos del Genal, junto con el que ya realizáramos el año pasado entre “Benalauría y La Venta San Juan” como se puede comprobar en: http://www.pasoslargos.com/comandopreston/benalauriaventasanjuan.htm para mas información consultar el libro: “Valle del Genal, Guía del Excursionista” (ruta 33, pág. 325).
Como en toda travesía, se requiere de una preparación previa de manera que en primer lugar
hay que dejar varios vehículos en el final previsto de ruta y trasladarse todos juntos en el resto de vehículos al comienzo. De manera que para esta ocasión, nos dimos cita a la entrada del bonito pueblo de Benarrabá, donde todos los partivcipantes llegamos con puntualidad para descender hasta el “Prado de la Escribana”, cruzando el vado que existe sobre el río Genal, donde normalmente se suele formar una especie de piscina natural, que para sorpresa de todos estaba mas seca que el desierto que sale en la escena de “El Bueno, El Feo y El Malo” en la escena en la que “Eli Wallach” va puteando a “Clint Eastwood”, sin salir de nuestro asombro por la desoladora imagen del Genal, completamente seco a su paso por “El Prado de la Escribana”, tras dejar allí unos cuantos vehículos continuamos todos juntos subiendo dirección Genalguacil, hasta ganar la carretera por la que finalmente iniciamos la bajada hasta la famosa “Venta San Juan”, punto estratégico del Valle del Genal, por tratarse del único paso de carretera sobre el río, en todo el tramo medio del valle.
Nada mas bajar a la base del puente, afortunadamente pudimos comprobar que, aunque algo mermado, el Genal bajaba con su caudal habitual para esta época del año. De manera que los mas osados no dudaron en darse el primer baño de toma de contacto con el agua, tras el cual se hizo la protocolaria foto de comienzo de ruta. Y así comenzamos a caminar por el mismo cauce del Genal, a través del primero de los numerosos túneles de vegetación de rivera que nos esperaban en esta bonita y agradecida ruta acuática. Sin embargo, siempre hay que extremar las precauciones en este tipo de rutas, ya que al mínimo descuido, se te puede mojar la cámara, el móvil o el interior de la funda que los protege, tal fue el caso de la “Rosa de Casarabonela” que en plena euforia tras la primera toma de contacto obligada, se despistó empapando la cámara y dejándola inutilizada para el resto de la jornada.
Los aproximadamente 20 senderistas que nos dimos cita en aquella jornada no tardamos en llegar al rudimentario puentecillo flotante de tablillas, preludio el “Árbol del Ahorcado” desde el que cuelga una soga, de la que se valieron los mas intrépidos del grupo, siempre encabezados y jaleados por “El Mago Gandalf” y seguido por “El Elfo de la Malagueta”, “Rosa de Casarabonela”, “El Talibán de Benaoján” y “El Tejón del Pico Mijas” no dudaron en tirarse en repetidas ocasiones, luciéndose en acrobáticos vuelos donde Rafa Flores se llevó la puntuación mas alta, fruto de la experiencia de románticas tardes de primavera en aquel mismo lugar, donde ya practicaba con Patro la manera de traer a Rafita a este mundo.
Una vez finalizada la sesión de saltos, proseguimos el descenso por nuevos, túneles de vegetación de rivera, donde íbamos charlando con compañeros que poco a poco vuelven a reaparecer tras prolongadas ausencias, tal era el caso del “Alférez Don Jesús” con su bañador modelito “Escocés”, “Don Fernando el Diácono” con la maglia Rosa del Giro de Italia, acompañado de su hijo pequeño Javi, así como del mismísimo Manuel Becerra Parra, mas conocido como “El Talibán de Benaoján” que venía acompañado por su novia “Estrella” de San Lucar de Barrameda. Antes de darnos cuenta, ya nos encontrábamos en otro ensanche del río, donde una pequeña plataforma de rocas, invitaba a realizar otra sesión de saltos en la que esta vez participó hasta mismísima Ana, también conocida como “La Venus de Boticcelli”. Poco después realizábamos la única parada intermedia de avituallamiento antes de llegar al final de ruta.
Reanudada de nuevo la marcha Patro y un servidor, animábamos a Rafita “Mr Calico Electrónico” y a Nacho “El Diablillo de Timanfaya” para que no perdieran la comba respecto al grupo, ya que estaban mas concentrados en sus conversaciones de pokemon y últimas novedades de la “nintendo DS” que en la caminata en cuestión. Por lo que pusimos en marcha un rudimentario juego de persecución que los mantuvo alerta y en las primeras posiciones del grupo, durante la mayor parte del resto de la ruta. Llegando así al conocido como “Paso del Cocodrilo” donde nos encontramos con un doble tramo de nado obligado, que siempre le aporta ese toque de euforia y diversión a toda ruta acuática. Digno de mención es el depurado estilo de natación del que hicieron gala numerosos compañeros del grupo entre los que destacaría a “La Dalia Negra”, que una vez mas realizaba la ruta con uno de sus modelitos “Coronel Tapioca” y por supuesto su marido Paco, “El Tiburón de Maro”, que acudía a la ruta con un bañador “Emidio Tucci”, con el glamour que requiere todo lo relacionado con nuestra compañera Angus.
Poco a poco, iban quedando atrás los túneles de vegetación de rivera, como el que nos encontrábamos a nuestro paso por el 2º “puente de tablillas”, atravesando tramos con el agua por la cintura en plan “Rambo”. Hasta que empezábamos a encontrarnos con tramos mas abiertos, donde ya podíamos contemplar la silueta de las montañas colindantes y la presencia de las choperas que poco a poco iban anunciando nuestra proximidad al “Prado de la Escribana”, pero antes de llegar, pudimos disfrutar de dos pozas, en sendos meandros verdaderamente idílicos, donde gran parte de los participantes disfrutaron de un reconfortante baño. En la orilla de la última poza, previa al final de ruta, una mariposa, permaneció totalmente inmóvil, ante nuestra presencia regalándonos una de las fotos mas bonitas de las últimas rutas, lástima hacerla bajo el fuerte sol del mediodía y sin una cámara en condiciones.
Aunque con el pelotón muy estirado, como suele ocurrir en todos los finales de ruta, llegamos al “Área Recreativa del Prado de la Escribana”, donde la temporada pasada tenía lugar la presentación del libro “Valledel Genal, Guía del Excursionista”, disfrutando todos juntos de un almuerzo de hermandad sendérica a la sombra de las encinas y alcornoques. Y donde se les hizo entrega a la intrépida señorita “Ana”, “Javi”, “Rafita” y “Nacho” de su carnet infantil de “Pasos Largos”, junto con un cuaderno de dibujo y un precioso cuento sobre la Sierra de las Nieves titulado: “Pinsapín y sus amigos” por gentileza de nuestro presidente “Rafa Flores” y la “Asociación de Grupo de Desarrollo Rural y Mancomunidad Sierra de Las Nieves”.
NOTA: Al día siguiente, domingo 10 de agosto por la noche, acudía el mismísimo “Mago Gandalf” al certamen de Jazz que tenía lugar en Genalguacil, escoltado en todo momento por “El Hombre que balizaba los caminos” y un nuevo discípulo. Siendo informado, de que el motivo por el río Genal, no llevaba agua a su aso por el “Prado de la Escribana” se debía a que un centenar de metros antes de llegar, no vimos el punto previo al final de la ruta por la frondosidad de la vegetación, le robaban todo el caudal al río para el riego de numerosas huertas de la zona. Llegando una vez mas a la conclusión de que muchos de los ayuntamientos que por su situación geográfica, presumen de u
n precioso entorno natural y pretenden incentivar la práctica del turismo rural, el senderismo y todo lo ecológico en general. Al final, no se cortan ni un pelo en masacrar, el cauce de los ríos que atraviesan su término municipal. Tal y como está haciendo en este momento el ayuntamiento de Genalguacil con el Genal, o el escandaloso abuso sistemático que vienen poniendo en práctica los ayuntamientos de Nerja y Frigiliana en los ós últimos años con los ríos Chillar e Higuerón respectivamente. De auténtico juzgado de guardia.
